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Emocionario: SOLEDAD

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¿Qué tal este puente? Yo, fenomenal, lo tengo que reconocer. He desconectado de todo y me he dedicado a mí y a disfrutar de mi familia. Nada más. Parón de cole, parón de blog y relax. Porque es que, además del viernes (que fue festivo), en mi colegio disfrutamos también del lunes como día no lectivo. Así que lo dicho, cuatro días de descanso físico y, sobre todo, mental :-)

Pero ya he vuelto con las pilas cargadas y con un nuevo post del Proyecto Emocionario. Hoy voy a hablaros de la soledad.




Como es habitual, partimos de la ilustración para abordar la emoción. Después de observarla, mis alumnos andaban un poco perdidos. ¿Qué podía ser? Bruno lo intentó con la diversión (desde luego, ese camino hacia la casa sobre la nube parecía muy divertido), pero viendo que era muy difícil, empecé a dar pistas:

- "Fijaos en la casa..." - empecé. - "¿Dónde está? ¿En una ciudad? ¿En un pueblo?..." - continué. - "¿Está muy acompañada?"- seguí. Y entonces Teo saltó: "¡La soledad!". ¡Fenomenal, Teo! Vamos a hablar de la soledad.

Antes de empezar a leer sobre la emoción, les pregunté a los niños si alguien quería decir algo de la soledad, si sabían qué era. Biel contestó: "Que te sientes solo". Entonces, yo añadí: "¿Es posible sentirse solo estando con gente?". Y todos contestaron: "¡Noooo!". "¿Alguien piensa que sí?", pregunté. Y levantaron la mano Nico y Lola. Poco a poco otros niños fueron animándose y levantando la mano. Entonces pregunté: "¿Por qué? ¿Por qué es posible sentirte solo cuando estás con gente?". Y contestaron:

- Carlos G: "porque no te escuchan".
- Adrián: "si te ignoran".
- Biel: "si no te hablan".
- Ares: "si no tienes amigos".

¡Fantástico! En todas estas situaciones puedes sentirte muy solo, por muy rodeado de gente que estés. ¿No os parecen unas estupendas reflexiones para niños de 6 y 7 años? Ya os digo que todavía no les había leído ni contado nada sobre la soledad :-)

Luego leímos el libro, para contrastar información. Cuenta el emocionario que la soledad es la ausencia de compañía, y que resulta muy práctica, por ejemplo, si no quieres que te molesten, pero puede ser angustiante si crees que no tienes a quién acudir o con quién compartir las cosas. Por tanto, la soledad en sí no es buena ni mala. Estar solo puede ser maravilloso en algunos momentos, aunque hay personas a las que la soledad les resulta desagradable. Por tanto, diferenciamos claramente la soledad por elección propia (aquella en la que uno se aísla buscando un momento de tranquilidad, reflexión, relax, concentración...) de aquella que no buscas y en la que te sientes solo porque crees que no puedes contar con nadie.

Después, el emocionario plantea la misma pregunta que les hice antes: "¿Es posible sentirse solo estando con gente?". Y, evidentemente, la respuesta es sí, cuando no puedes contar con las personas que te rodean o cuando te dejan de lado. Para vencer la soledad es muy importante comunicarse. En esto nos extendimos muchísimo. ¿Cuántas veces nos hemos quedado solos por un malentendido? ¿Cuántas veces nos sentimos decepcionados porque el otro no actúa como esperábamos? Creo que los niños son, especialmente, "víctimas" de una pobre comunicación. No siempre, claro está. Pero no tienen la competencia lingüística y comunicativa de los adultos. A veces les faltan herramientas. Entonces, pueden enfadarse con un amigo porque creen que no le entiende o porque hace algo que no esperaban. ¿Pero tú le has explicado cómo te sientes? ¿Le has dicho lo que esperas? ¿Lo que quieres? En fin, me fijo en los niños porque estoy día a día rodeada de ellos, pero veo muchísimos adultos que "pecan" de lo mismo. Eso sí, los niños son mucho menos rencorosos y vuelven a ser amigos en dos minutos. No se tienen en cuenta esas "minucias". En ese sentido, podría aprender más de uno. Una cosa es hacer las cosas con mala intención, y otra muy diferente, un malentendido por una comunicación insuficiente. Pero eso es otro tema...

Cuando echas de menos los momentos en los que no estabas solo, experimentas nostalgia.

Pasamos a las experiencias de mis alumnos con la soledad:

  • Óscar: "Un día, con mi hermano, estaba jugando al campo de fútbol de playmobil y luego no quiso jugar porque nos enfadamos. Y me sentí solo". Vaya, ¿un ejemplo de soledad ligada a la falta de comunicación?
  • Marc: "Nunca he sentido soledad". Bueno, eso está fenomenal. Entonces Lola, Eric, Keyla, Pablo S, Ares, Marco, Toni, Teo, Haizea y Luis añadieron que ellos tampoco la habían sentido nunca. ¡Eso es que estáis muy bien rodeados!
  • Claudia: "Cuando no encuentro a mi madre, a mi padre y a mi hermana me siento sola". Claro, normal... ¿Dónde estarán todos?
  • Nico: "Una vez, cuando fuimos a Disney, me perdí y no encontré a mis padres". Bueno, entiendo que al final sí les encontraste ;-) Y además de sentirte solo, ¿te sentiste desamparado, como tus compañeros, cuando se han perdido?
  • Bruno: "Cuando estaba tomando un chocolate caliente en casa, mi abuelo y mis primos me estaban ignorando". Mmmmm, quizás estaban hablando de sus cosas, o pendientes de otro tema. Pero lo cierto es que, cuando sientes que te ignoran, te sientes solo. ¡Ya lo ha dicho Adrián al empezar la sesión!
  • Joshua sitió soledad "un día que estaba fuera y me perdí con mi papá y mi mamá". Claro, si te pierdes, te sientes solo. ¡Y seguro que muchas más cosas! ¿Tal vez sentiste miedo? ¿Confusión? ¿Inseguridad? ¿Tensión?
  • Giulia: "Un día tenía una mejor amiga y se fue de viaje y hace mucho tiempo que no la veo. Y me sentí sola". Simona, ¿verdad? Ya me han hablado de ella. Es normal que si tu mejor amiga se va, te sientas sola, pero afortunadamente tienes muchos más compañeros y amigos en clase. Eso sí, ¡entiendo que la eches de menos! ¡Hay amistades muy especiales!
  • Lola, que antes había dicho que nunca había sentido soledad, recordó una experiencia: "Cuando viajé a Disneyland París, estaba viendo un espectáculo de Mary Poppins y me quedé sola". Sí, nos lo contaste la semana pasada. Te perdiste y te sentiste desamparada.
  • David: "Cuando mi padre se va a la lavadora y yo me quedo arriba, me siento un poco solo. Tarda mucho". Bueno, has hecho bien en especificar ese "un poco solo". Es verdad que en ese momento estás solo, pero sabes que volverá y que puedes contar con él :-)
  • Biel: "Estaba un día en Mercadona y estaba mirando unas cosas y mis padres se fueron del pasillo y me quedé solo". Como Lola, nos lo contaste la semana pasada hablando del desamparo, aunque dijiste que fue en Carrefour. ¿Nos hemos liado con los supermercados o es que te ha pasado más de una vez? ;-)

Como veis, mis niños no tienen demasiadas experiencias de soledad, al menos de ese tipo de soledad en que sientes que no puedes contar con nadie. ¡Y que dure! ¡Están rodeados de personas que les quieren y se preocupan por ellos!

¿Y vosotros? ¿Sentís soledad muy frecuentemente? Yo, en algunos momentos, busco mis momentos de soledad para poder concentrarme en mis cosas. ¡Aunque a veces resulta complicado!

En breve, ¡una nueva emoción!

* Aunque yo no voy a utilizar las fichas de actividades porque mis alumnos son muy pequeños, aquellos que trabajéis el emocionario con niños de más edad, disponéis de unas fichas de trabajo preparadas para realizar después de cada emoción. Aquí podéis descargar la ficha de la soledad.



Cumpleaños de abril: Marc, Teo, Ares y Biel

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Hoy toca felicitar a los alumnos que celebraron su cumpleaños el mes de abril: Marc, Teo, Ares y Biel. ¡Muchas felicidades, campeones!



Como sabéis, en este 2015 mis alumnos están cumpliendo ya 7 años. Y el último jueves de mes, toca celebrarlo en el colegio con los compañeros. Así que el jueves pasado, coincidiendo con la muestra cultural, ¡celebramos la fiesta! Como eran nada más y nada menos que 4 cumpleañeros, tuvimos comida y bebida para un regimiento. Bizcocho de naranja, unos estupendos buñuelos/profiteroles caseros (¡gracias, mamá de Biel!), Doritos, Cheetos, gusanitos y patatillas de todo tipo, naranjada, 7up, aquarius de limón y zumo de mandarina. ¡Casi nada! Los niños se pusieron las botas, repitieron todo lo que quisieron, y sobró mucha comida y bebida (que volvió para casa).

Aquí tenéis un vídeo homenaje con fotos y fragmentos de vídeo del momento de la fiesta/merendola.  Y, como digo siempre, que cumplan muchos más y, sobre todo, ¡así de felices!


Dibujar, colorear y garabatear

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El post de hoy va a ser muy visual y con muy poco texto (vamos, en mi estilo, jeje). Y es que hoy quiero de hablaros de un libro: El gran álbum para dibujar, colorear y garabatear de la editorial Usborne.



Una vez más, lo compré para mi hija hace unos años. Mi idea era estimular un poco su lado artístico, ya que no es precisamente la faceta en la que más destaca. Sin embargo, tampoco debe ser la que más le gusta, porque años después de comprarlo sólo había coloreado una página, y ni siquiera la había acabado. ¡Y que conste que ella lo eligió conmigo! Pero está claro que prefiere invertir su tiempo libre en otras cosas. Así que pensé: "¡Pues me lo llevo al cole a ver si a mis niños les atrae más!". ¡Y ya lo creo que les ha gustado! No paran de preguntarme: "¿Y tú dónde compras siempre cosas tan bonitas?". Yo les digo que no hay una "tienda para Elena", sino que las compro en muchos sitios diferentes. Y más de uno me ha respondido: "Pues si tuvieras una tienda, yo iría a comprar allí, porque me encantan todas tus cosas" :-)

En fin, lo que me gusta de este libro es que, además de tener dibujos preciosos para colorear (algo que les relaja muchísimo), deja un gran espacio al desarrollo de la creatividad. La mayoría de los dibujos no están acabados, sino que tienes que completarlos, por lo que inevitablemente hay que echar mano de la imaginación. Y si algo les sobra a mis niños es creatividad e imaginación. Así que en estos últimos meses han ido realizando algunos diseños, a ratitos, cuando acaban sus tareas o tenemos algún momento. ¡Y el resultado es genial! O al menos, eso me parece a mí, partiendo de la base de que son alumnos de 1º de primaria... Mi hija, cuando lo compramos, iba a unos cuantos cursos más.

Mirad, por ejemplo, esta página. Tenemos unos cuantos monstruos (que nos sirven de modelo e inspiración) y nosotros tenemos que completar la página con más monstruos.



O esta otra en la que hay que dibujar los sombreros o las personas que faltan.



¿Y qué me decís de estos geniales marcos en los que hay que realizar retratos?



Como este lo hemos realizado en clase, puedo mostraros algunas de sus creaciones.







Geniales, ¿verdad?

También les encantó esta lámina de plantas carnívoras a las que hay que dibujarles las caras, así como algunas moscas a punto de ser devoradas.



Aquí tenéis algunos de sus trabajos.







¿Adivináis cuál es de una niña? ;-)


Aquí tenéis otra de monstruos. En este caso, hay que dibujarlos alrededor de los ojos. Creo que será la próxima fotocopia que haga para tener en clase. ¡Seguro que a mis niños les encanta!



¿Cómo pensáis que quedará esta ciudad después de adornarla con motivos y dibujos de colores?



En este otro dibujo, sólo hay que colorear. Pero no me digáis que el diseño no es fantástico. Hay que fijarse en los detalles: distinguir las ramas y hojas de los árboles, las diferentes jirafas y sus manchas, la hierba, el fondo... ¡Para entrenerse un rato!



Pero como veréis, ¡a mis niños no les supuso ningún problema!





En este otro diseño, también hay "sólo" que colorear. Pero, claro, hay muchas formas de hacerlo. Si nos fijamos bien en todos los detalles, combinamos bien los colores, y vamos trocito a trocito... ¡hay un gran trabajo! Me recuerda, en cierta forma, al trabajo minucioso de las mandalas...



Como me pareció excesivo fotocopiar las dos páginas, a mis alumnos sólo les di las de la derecha, en tamaño DIN-A4. ¡Me pareció más que suficiente para niños de 1º de primaria! Al ser trocitos pequeños para colorear, la mayoría optaron por los rotuladores (ya sabéis que en espacios muy grandes puede ser un poco desastroso...).





¿Qué podemos encontrar bajo tierra? En este diseño, tenemos que dibujar cosas enterradas. ¡Seguro que a mis alumnos se les ocurrirían muchísimas!



¿Os atrevéis con una ciudad? Aquí hay que añadirárboles, edificios, nubes y ventanas.



Estas páginas nos invitan a dibujar fantásticas pelucas sobre las cabezas de estos actores. ¿Os imagináis lo que serían capaces de diseñar mis alumnos? Me imagino pelucas hasta con pizza...



No me digáis que el siguiente diseño no os trae recuerdos de vuestra adolescencia. ¿Quién no se ha puesto a hacer garabatos en papel cuadriculado? Este, por ejemplo, no se lo pondría a mis alumnos. Creo que todavía son demasiado pequeños...



Bueno, y así podría mostraros todo el libro porque, desde mi punto de vista, ¡no hay ninguna página que tenga desperdicio! ¡Y son una estupenda fuente de inspiración!

¿Qué os ha parecido? ¿Conocíais este libro? Supongo que estaréis de acuerdo conmigo en que es perfectamente apto para dibujar, colorear y garabatear ¡con gusto y creatividad! 

¿A que a más de uno le han entrado ganas de colorear él mismo? ;-)

Emocionario: NOSTALGIA Y MELANCOLÍA

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Hoy os traigo una sesión del Proyecto Emocionario en la que trabajamos dos emociones, ya que están muy vinculadas: la nostalgia y la melancolía. En primer lugar, trabajamos la nostalgia, ya que la melancolía la quería introducir a partir de la primera.



No me digáis que mis niños no lo tenían complicadillo de adivinar a partir de la ilustración. Sí, las sombras del columpio y el perro evocan tiempos mejores, pero si uno no sabe de qué se trata... Complicado.

La observamos y observamos intentando deducir qué podía representar. Biel probó con el aburrimiento, pero no. Marc con la envidia (siempre intentan colar la envidia, ya que llevamos muchas emociones y todavía no hemos hablado de ella). Pablo C. lo intentó con el miedo, ¡pero hay que ver cómo saltan todos cuando dicen una emoción que ya hemos trabajado!. Y Teo con la tensión. Más de lo mismo: "¡que ya la hemos vistooooo!".

Pero es que resulta que no quieren que yo desvele el misterio. ¡Quieren adivinar la emoción ellos! Por lo que piden pistas. Les dije que era como echar de menos tiempos mejores... O algo o alguien que ya no tenemos... O una situación que vivimos y echamos en falta...

Y siguieron intentando emociones una y otra vez. ¡Y lo que no son emociones! Un día tengo que apuntar las palabras que se inventan.

Hasta que, al final, lo terminé diciendo yo. Hoy vamos a trabajar la nostalgia.

Cuenta el emocionario que cuando estamos nostálgicos, sentimos que algo o alguien nos falta: un amigo, un familiar, un juguete... Y esa ausencia nos entristece, es decir, que sentimos tristeza al recordar. En esto insistimos bastante, ya que no por recordar un momento bueno, por ejemplo, sentimos nostalgia. Muchas veces, nos alegramos al recordarlo, o nos entusiasmamos porque sabemos que se volverá a repetir en breve. La nostalgia siempre tiene un componente de tristeza, aunque no sea muy marcado.

La nostalgia es, por tanto, el sufrimiento de pensar en algo que se ha tenido o vivido en una etapa y ahora no se tiene o ha cambiado. Es anhelar un momento, situación o acontecimiento pasado. La nostalgia se asocia fácilmente a recuerdos cariñosos de la infancia, de un ser querido, un objeto personal estimado, un suceso en la vida de la persona o el propio país, cuando vives lejos de él.

Cuando la nostalgia se hace parte de tu día a día, terminas siendo presa de la melancolía.

Aquí les enseñé directamente la ilustración de la melancolía sin tratar de adivinarla, ya que venía al hilo de lo que estábamos hablando.



La melancolía es una forma acentuada de nostalgia. Como con cualquier otra emoción, pasa a ser patológica cuando altera el normal funcionamiento del individuo. Es decir, se considera normal que una persona se sienta melancólica una tarde y se quede en casa mirando fotografías viejas. Pero si esa conducta se repite durante muchos días y la persona deja de lado sus obligaciones y su vida social, puede pasar a ser un tipo de depresión. 

El placer del melacólico consiste en flotar en su propia melancolía. Si ese placer se evapora, surge el aburrimiento.

En esto no me extendí nada porque sólo me falta tener a mis niños melancólicos. Espero que la máxima melancolía que ellos sientan es la del domingo por la tarde, cuando ven con resignación y "tristeza" que una diversión o un momento agradable está a punto de concluir (es un ejemplo que pone el emocionario). Pero, pensándolo bien, ¡qué digo! ¡Espero que el domingo por la tarde estén súper contentos porque ya les queda menos para volver a verme! ;-)

Bromas aparte, en los ejemplos que ellos pusieron no hicimos distinción entre nostalgia y melancolía, y les dejaba expresar libremente una u otra palabra. Estas fueron sus experiencias y aquello que compartieron en clase:

  • Óscar: "Yo siento melancolía cuando deseo ir a Asuño" (lo siento, pero no conseguí averiguar qué pueblo es. Así me lo dijo él). "Es el pueblo de mis abuelos y veo a mis amigos".
  • Pablo C: "Cuando voy a Madrid hay un perro que se llama Duque y me lo paso muy bien jugando con él". Así que Pablo siente nostalgia cuando piensa en Madrid.
  • Keyla: "Cuando mi padre se va a Brasil siento nostalgia".
  • Lola: "Cuando recuerdo a mi abuelo que se murió siento nostalgia".
  • Claudia: "Cuando mi abuela se va a Málaga siento nostalgia. Y también cuando mi padre se fue a la nieve con sus amigos".
  • Nico: "Cuando una perra de mis abuelos murió sentí melancolía". 
  • Ares sintió nostalgia "cuando me contaron cosas de mi tatarabuela, que está muerta. No la conocí, la vi en una foto".
  • Toni: "Lo mismo que Nico".
  • Marc: "Cuando me fui a Madrid tenía un primo que me gustaba mucho: me daba chuches, y cuando jugábamos un partido de fútbol, iba en mi equipo y marcaba muchos goles. Antes de que me fuera, hicimos una foto de todos los primos que estábamos en Madrid. Siento nostalgia cuando miro la foto".
  • Bruno: "Nunca he sentido nostalgia". Yo le pregunté: "¿No recuerdas nada con un poco de tristeza?". Y me contestó: "Bueno, sí, una cosa. Mi perro que tenía en mi finca. Me lo encontré, y luego no volvió".
  • Adrián: "Cuando me fui a Madrid sentí melancolía porque recordaba a mi hermano pequeño que no vino, a mi canario, a mi conejo, a mi abuela, a mi abuelo, a mi tía y a mi tío". ¡Claro! ¡Si es que echabas de menos a media familia!
  • Carlos G: "Cuando se fue Aina del cole" (fue su profesora en los dos primeros cursos de infantil). "Siento nostalgia cuando la recuerdo". Aina, nunca nos hemos conocido, pero si alguna vez lees esto, que sepas que Carlos te recuerda con nostalgia. ¡Muchas cosas buenas debiste hacer! ;-)
  • Pablo S: "Cuando voy a casa de mis primos. Cuando me voy, en unos cuantos días, les echo de menos".
  • Marco: "Cuando mi amigo se fue a otro planeta". Aquí es cuando todos pusimos los ojos como platos (imaginaos unos cuantos emoticonos de sorpresa). Entonces yo insistí: "A ver, Marco, explícanos esto mejor. ¿Un amigo tuyo se fue a otro planeta?". Y me contestó: "Sí, Gabriel, del otro cole. Se fue y dijo que se iba a otro planeta". Entonces Ares soltó: "¡Tu amigo flipa!". Y la verdad es que todos nos reímos. Anécdotas del emocionario. Tengo que reconocer que siempre surgen situaciones muy divertidas. Tuve que decirle a Marco (que seguía serio y algo desconcertado) que era poco probable que su amigo se hubiera ido a otro planeta. Igual se fue a otro país. O simplemente cambió de colegio y quería convertir su marcha en algo interesante... No sé. En cualquier caso, Marco sintió nostalgia con la marcha de su amigo Gabriel.

Y a vosotros, ¿qué os produce nostalgia? ¿Os ponéis melancólicos frecuentemente? Yo, hace años, tendía más a la melancolía (cosas de la juventud, jeje). Ahora soy bastante más práctica y me centro el el presente. Además, ¡practico mindfulness con mis niños! Hay que estar conscientemente presente, desde una actitud abierta y amable ;-)

¡En breve, una nueva emoción!

* Aunque yo no voy a utilizar las fichas de actividades porque mis alumnos son muy pequeños, aquellos que trabajéis el emocionario con niños de más edad, disponéis de unas fichas de trabajo preparadas para realizar después de cada emoción. Aquí podéis descargar las fichas de la nostalgia y la melancolía.


Actividades con euros

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Esta semana hemos empezado a trabajar actividades con euros. Antes de empezar el tema correspondiente del libro de matemáticas, quise presentar a mis alumnos todas las monedas y billetes, explicarles su valor y empezar a trastear con ellos. Además, quería averiguar cuáles eran sus conocimientos previos, ya que estaba segura de que muchos ya sabían muchísimo sobre nuestra moneda.

Una vez más, me traje un recurso de casa que le compré a mi hija cuando empezó a trabajar los euros en el colegio. Se trata de un simple juego de actividades con euros, que incluye monedas y billetes  en tamaño real. A los niños les encanta manipular las monedas y los billetes, y además, son de plástico resistente. Suyay nos muestra el juego.


Pero antes de abrir el juego, les pregunté cuál era la moneda más pequeña que conocían. No lo dudaron. ¡La de 1 céntimo! De la misma forma, me fueron nombrando todas las monedas y billetes que seguían, de menor a mayor valor: 2 céntimos, 5 céntimos, 10 céntimos, 20 céntimos, 50 céntimos, 1 euro, 2 euros, 5 euros, 10 euros, 20 euros, 50 euros, 100 euros, 200 euros y 500 euros. ¡Son unos cracks! 

Una vez que las teníamos todas apuntadas en la pizarra, nos fijamos en un detalle: ¡siempre se repetían los números 1, 2 y 5! ¡Ahora sí que nos acordaremos de todas!

Con el tema del euro, nos familiarizamos bien pronto con los números decimales (algo que no ocurría cuando teníamos las pesetas. Creo que el primer número decimal que yo vi, fue en 5º curso del extinguido EGB).

En función de dónde coloquemos los números 1, 2 y 5, tendremos todas las monedas y billetes de diferente valor. Puede parecer complicado en un principio, pero muchos de mis alumnos sabían perfectamente que 1,03€ es 1 euro y 3 céntimos. Y 1,30€ es 1 euro y 30 céntimos. Por tanto, quizás sin comprender exactamente el valor y significado de las décimas y las centésimas, para el manejo del dinero lo tienen bastante claro.

Empecemos, pues, colocando los números 1, 2 y 5 en la posición de las centésimas: 0'01, 0'02 y 0'05. Tenemos las tres monedas más pequeñas, las de color cobre, con valor de 1, 2 y 5 céntimos respectivamente. Pablo S, Lola y Pablo C. nos las enseñan.


Seguimos con los números 1, 2 y 5 en la posición de las décimas: 0'10, 0'20 y 0'50. Tenemos las tres monedas siguientes, las de color dorado, con valor de 10, 20 y 50 céntimos respectivamente. Claudia, Teo y Jaime nos las muestran.


Ahora lo más fácil, ponemos los números 1, 2 y 5 en la posición de las unidades: 1, 2 y 5. Tenemos las dos monedas más grandes (plateada con borde dorado y dorada con borde plateado) y el billete más pequeño, con valor de 1, 2 y 5 euros respectivamente. Haizea, Marco y Marc posan orgullosos.


Pasamos el 1, 2 y 5 a la posición de las decenas, que también controlamos muy bien: 10, 20 y 50. Tenemos los tres siguientes billetes, con valor de 10, 20 y 50 euros. Los más comunes. Giulia, Toni y Ares nos los muestran.


Y, por último, ponemos los números 1, 2 y 5 en la posición de las centenas, que no las estudiamos en 1º, pero que mis niños ya conocen: 100, 200 y 500. Y tenemos los tres billetes de más valor, de 100, 200 y 500 euros. ¡Los más deseados! Keyla, Joshua y Eric los tienen en su poder.


Aquí tenemos todos los billetes y monedas.



Una vez presentados todos los billetes y monedas, y explicado en la pizarra su valor, hicimos algunas actividades de las que propone el juego.

Por ejemplo, Carlos G. nos coloca en esta lámina todo aquello que tiene un valor mayor de 10€.


Óscar, en este otro ejemplo, coloca en la lámina lo que tiene un valor menor de 5€. ¡Todas las monedas!


Adrián, en este otro caso, tiene que escoger aquellas monedas y billetes que tengan un valor mayor de 0'50€, es decir, de 50 céntimos.


Aquí, Biel, se va de compras al súper. Y tiene que pagar un filete de carne que vale 3'70€ con 4 monedas.


¡Fenomenal, Biel! Una moneda de 2€, una de 1€, una de 50 céntimos y una de 20 céntimos.

Bruno hace lo propio con unas golosinas que valen 1'65€.


¡Genial! Una moneda de 1€, una de 50 céntimos, una de 10 céntimos y una de 5 céntimos.

Ahora, Carlos S, compra unos sabrosos tomates por 1'80€. ¿Cómo pagará?


¡Sin despeinarse! Una moneda de 1€, otra de 50 céntimos, otra de 20 céntimos y, por último, una de 10 céntimos. ¡Chupado!

Suyay lo tuvo un poco más difícil para comprar una barra de pan de 1'03€, porque la forma más fácil sólo tiene 3 monedas. Tuvo que buscar la fórmula en que le saliesen 4 monedas.


¡Chapeau! Cambiamos la moneda de 1€ por dos de 50 céntimos, y luego completamos el pago con una moneda de 2 céntimos y otra de 1 céntimo. También hubiera servido poner la moneda de 1€ y luego tres de 1 céntimo.

Pablo S. también tuvo que buscar una opción alternativa para pagar la tartaleta de piña de 2'60€ con 4 monedas, porque su primer impulso fue coger la moneda de 2€.


No ha sido difícil. Dos monedas de 1€, una de 50 céntimos y una de 10 céntimos. Aunque si hubiera cogido la moneda de 2€, como pretendía en un principio, también lo podría haber resuelto, añadiendo una moneda de 50 céntimos y dos de 5 céntimos. O tres de 20 céntimos.

Lola compra una botella de agua que vale 0'85€.


Perfecto. Una moneda de 50 céntimos, una de 20 céntimos, una de 10 céntimos y una de 5 céntimos.

Pablo C. realizó un ejercicio más complejo. Cogió una lámina con diferentes billetes y monedas, fue colocando los billetes y monedas correspondientes encima, y luego tuvo que adivinar el total del dinero que había sobre la lámina.


Muy rápidamente, Pablo dijo que había 33'98€, pero cuando le dije que no era correcto, enseguida se dio cuenta del fallo. ¡Eran 33'88€! ¡Súper!

Por último, Claudia y Teo recrearon la compra de un libro. Cogimos un libro mío y decidimos un precio: 19'37€. Claudia era la vendedora. Teo, en un primer supuesto, pagó con el dinero justo.


Claudia comprobó que era correcto. Pero luego, pensamos que no siempre llevamos el dinero justo en la cartera, por lo que Teo pagó con un billete de 20€ y Claudia tuvo que devolverle el cambio.


El tema del cambio es un poquito complicado mentalmente, pero nosotros siempre restamos con la fórmula "cuánto falta para llegar a...", es decir, que si tengo que hacer 9 menos 3, cuento a partir del 3 hasta el 9. Voy hacia delante. En el caso del cambio, lo hicimos igual. Contamos a partir de 37 hasta llegar a 100 (sabemos que 1€ tiene 100 céntimos). Y mientras íbamos contando, sacábamos las monedas. Finalmente, teníamos el cambio sobre la mesa: 63 céntimos.

¿Qué os ha parecido nuestra sesión introductoria al euro? Completita, ¿verdad? Ahora estamos trabajando el tema con el libro de texto, pero los niños ya van con mucho aprendido. Además, cuando acaban sus tareas, me piden el juego y practican. ¡Hasta montan tiendas entre ellos! Se venden sus bolis, lápices, gomas, estuches... ¡Todo lo que pillan!

Ahora, además, tengo que llevar el iPad a clase para que jueguen con una aplicación que tengo, "Monedas en la selva". Otra manera amena de aprender. Aquí tenéis unas capturas de pantalla.







¡Espero que les guste!

Salida a Natura Parc

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Hoy hemos realizado una salida a Natura Parc. Una actividad que hemos disfrutado muchísimo. Los niños se han entusiasmado con los animales. Una de las frases que más se ha oído es: "¡Qué monaaadaaa!"

Aquí tenéis a mis niños en la entrada del parque. ¡Bien felices! (Bueno, en realidad, la foto la hemos hecho cuando hemos terminado la visita, pero en la entrada del parque, jeje).


Y aquí a nuestros compañeros de 1ºA, aunque dentro del parque sólo hemos coincidido a la hora de la merienda, porque cada grupo hemos ido con monitores diferentes.


Os podría contar muchas cosas de los animales que hemos visto, pero creo que lo mejor es que lo veáis vosotros mismos. Por eso he realizado muchas fotos y he grabado bastantes fragmentos de vídeo, para que podáis disfrutar casi tanto como lo hemos hecho nosotros. Además, veréis a los niños en plena acción, viviendo con intensidad la jornada. Sus comentarios, muchas veces, son totales. Cuando estábamos viendo los murciélagos, a pesar de que el monitor nos había explicado que son animales que se alimentan de frutas, se puede oír a un niño que dice: "¡Y, además, te chupan la sangre!"¡Jajaja! De todas, formas, por si acaso, nos mantendremos lejos.

En fin, hemos visto tortugas, búhos, murciélagos, grullas, chinchillas, ardillas, suricatos (como Timón, el amigo de Pumba en El Rey León), buitres, lemures (según Claudia, uno de ellos estaba haciendo meditación, como nosotros. ¡Ya le veréis la postura!), loros, armadillos, pavos reales, cabras, ovejas, caballos, vacas, cerdos, cebras, leopardos, tigres, canguros, monos, mapaches, cervatillos… ¡En fin, un montón de animales! Además, muchas más especies de aves (de las que soy incapaz de recordar el nombre).



¿Os habéis fijado que los pies de los monos son casi iguales que las manos? :-)

También hemos hecho un mini taller de jardinería. Cada niño ha sembrado una pequeña lechuga en una maceta y mañana se la llevarán a casa. Ahora toca dejarla en un lugar donde le dé la luz del sol (si es posible, al exterior), regarla cada día un poquito y esperar a que crezca durante unas semanitas. ¡Luego, a comérsela! ¡Espero ver alguna foto de las lechugas ya crecidas! ¡Y de la sabrosa ensalada!


Ha sido una jornada estupenda y los niños han aprendido muchísimo a la vez que se han divertido. Además, nos han dado una unidad didáctica para trabajar en clase y reforzar lo aprendido. ¡Y una invitación gratis para cada niño, para que puedan volver otro día!



Aquí tenéis el álbum de fotos.


Y aquí los vídeos que he grabado. ¡Totales!


¡Esperamos que os gusten y que disfrutéis mucho con nosotros!

Emocionario: ABURRIMIENTO

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Seguimos avanzando en el Proyecto Emocionario, y esta semana vamos a hablar del aburrimiento. En clase, en realidad, vamos un poco más avanzados, y es que he empezado a trabajar dos emociones a la semana para poder verlas todas antes de que acabe el curso. Yo, a mi ritmo, os las iré contando todas.



Como ya os he dicho muchas veces, mis alumnos quieren adivinar la emoción por ellos mismos, por lo que prueban con todo tipo de palabras. En esta ocasión lo intentaron con tristeza, extrañamiento, miedo, soledad...  Pero cuando prueban con alguna que ya hemos visto, el resto protesta: "¡Ya la hemos visto!". Lo digo cada semana, ¡pero es que ellos también lo hacen! Y más ahora que tenemos todas las ilustraciones colgadas en un mural, por orden, porque las miran y buscan. A veces los encuentro susurrando: "Esta es la aceptación" o "esa es la hostilidad". ¡Las reconocen todas!

Cuando llevan unos cuantos intentos y siguen desorientados, me piden pistas. En este caso, la pista fue una onomatopeya: "¡Brrr!", hice suspirando.

- "¡Cansancio!"- dijo Adrián.
- "¡Aburrimiento!"- dijo Luis. ¡Exacto, Luis! Creo que este cerdito está un poco aburrido...

Les pregunté: "¿Alguien sabe qué es el aburrimiento?". Y Nico contestó: "Cuando no sabes qué hacer".

También llamado hastío o desgana, el aburrimiento es una mezcla de fastidio y cansancio que surge cuando no hacemos nada o cuando lo que hacemos no nos satisface.

Una curiosidad del aburrimiento es su relación con el tiempo: cuando nos aburrimos, tenemos la sensación de que el tiempo va más lento. ¡Se estiiiiiiiira! Un ejemplo típico en los niños es que nos pregunten muchas veces la hora: "¿Qué hora es?". Y al cabo de tres minutos: "¿Qué hora es?". Y al cabo de otros dos: "Y ahora, ¿qué hora es?". Y nosotros: "¡Pues qué hora va a ser! ¡Un minuto más que hace un momento!". Pero que tire la primera piedra quien no haya mirado repetidamente el reloj en según qué situaciones que parece que no acaban nunca. Y de manera contraria, cuando lo estamos pasando fenomenal, el reloj parece que ha puesto el turbo. "¿Yaaaaaaa?". Me encanta cuando acabamos una sesión o toca ir al patio y los niños preguntan: "¿Ya es la hora?". ¡Buena señal!

Otro aspecto que tiene el aburrimiento es que parece que va disminuyendo con la edad. Cuando yo era pequeña y decía que me aburría, mi madre me contestaba: "¡Pues yo no tengo tiempo de aburrirme!". Y qué razón tenía. Yo, hoy por hoy, tampoco tengo tiempo de aburrirme. Creo que el día tendría que tener unas 104 horas para que pudiese llegar a aburrirme. Y, en el caso de quedarme sin cosas que hacer, no lo vería como aburrimiento, sino como relax. ¡Qué ganas de "tirarme a la bartola"!

Como siempre, el aburrimiento crónico es tan insano como el estrés. No se puede vivir sin motivación, que es lo que nos lleva a movernos y conseguir objetivos. Una forma de vencer el aburrimiento es lanzar ideas que nos despierten la ilusión.

De todas formas, os recomiendo leer este artículo que explica perfectamente por qué el aburrimiento es bueno en los niños. Hoy en día, solemos tener a los niños hiperocupados, con todo su tiempo planificado con diferentes actividades y, cuando no es así, les ofrecemos entretenimientos tecnológicos. Pero lo cierto es que los niños necesitan toparse con tiempo no estructurado, en el que tengan tiempo de explorar su mundo interno y externo, que es el principio de la creatividad. Tendrán que imaginar, crear e inventar, además de que podrán descubrir sus propias pasiones. También  es esencial para los niños tener la experiencia de decidir por sí mismos cómo usar los periodos de tiempo no estructurados, o nunca aprenderán a manejar bien su tiempo. El artículo, además, propone una idea genial: el tarro del aburrimiento. Un bote lleno de ideas escritas en trozos de papel. Si el niño se aburre, debe coger tres papelitos y escoger una de las propuestas. Y tranquilos, que hay muchísimas propuestas. Y, por supuesto, podéis añadir las vuestras, en función de las características de vuestros hijos y de vuestras propias posibilidades. En fin, que creo que es un buen artículo para quien quiera lidiar con el aburrimiento de sus hijos :-)

¿Y qué experiencias tienen mis niños con el aburrimiento?

  • Óscar: "Un día vi una peli y entonces otro día la volví a ver y me cansé de ella. Y me sentí aburrido". Eso es que no es tu peli favorita. Durante una buena temporada de mi infancia, me pasé las tardes de los viernes viendo Sonrisas y lágrimas. ¡Y nunca me aburrí viéndola!
  • Adrián: "Cuando había un camino muy largo y tardábamos mucho en llegar y yo me aburrí". Bueno, esto es un clásico. "¿Cuánto falta?", "¿cuándo llegamos?", "¿queda mucho?". Pues como con la hora: "¡Queda 1 km menos que hace 1 km!"
  • Keyla: "Cuando tengo que hacer los deberes de Aloha. Es un aburrimiento. Me he despuntado por eso". Vaya, está claro que no te motivaban. Sin embargo, otros niños disfrutan haciendo  esos deberes.
  • Pablo C: "Lo mismo que Keyla". "¿Y también te has desapuntado?", le pregunté. "No". 
  • Lola: "Cuando hago los deberes de Kumon". ¡Vaya con los métodos de matemáticas! Aunque Lola hace también el método de lectura. Sin embargo, Lola dice que le gusta Kumon, pero que le aburre un poco tener que hacer los deberes cada día.
  • Claudia: "Ayer, cuando estaba en casa de mi abuela, mi madre vino y dijo: Nos vamos a casa. Pero después se quedó de pie hablando con mi abuela, y habíamos estado allí una hora porque se habían distraído hablando. Y nosotras nos aburríamos porque había un apagón y no funcionaba nada". ¡Jajaja! Es que las madres y las abuelas somos tremendas. ¡Pero podíais haber usado la imaginación para aprovechar ese tiempo de apagón!
  • Teo: "Cuando juego solo al fútbol". Claro, es que el fútbol es un deporte de equipo. Igual deberías buscar alternativas de juego para cuando estés solo...
  • Giulia: "Ayer por la noche estaba viendo la tele, y mi madre me dijo que me fuera a la cama. Y cuando estoy en la cama, quiero ver más tele y me aburro". ¡Vaya con la tele! Pues yo en la cama tampoco tengo tiempo de aburrirme. ¡Será que caigo rendida!
  • Marc: "Cuando juego a la Wii, a súper Mario 3D world, cuando acabamos un nivel y yo tengo más puntos que mi hermano, me aburro de tener tantas veces la corona de campeón. Me aburro de tantas veces ganar". ¡Tremendo! Pues dale ventaja, jajaja. O busca un rival más fuerte. O, mejor, busca un juego en el que tengas que esforzarte mucho para ganarle. Y si puede no ser tecnológico, mejor.
  • Bruno: "Cuando estábamos viendo mis primos y yo una película de Harry Potter, me aburría, pero al final había una cosa que me divertía mucho". Todos hemos visto películas que no nos han entretenido nada. Si te soy sincera, yo tampoco soy nada fan de la saga de Harry Potter.
  • Marco: "Cuando le pido a mi madre que juegue conmigo, me dice que 5 minutos, y cuando pasan esos 5, me pide otros 5. Y me aburro esperando". Giulia dijo que a ella le pasaba lo mismo. Jeje, es que no sabéis la de ocupaciones que tenemos las madres. Os recomiendo un tarro del aburrimiento :-)
  • Carlos G: "Un día en la Wii, cuando mi hermana escogió el barranco champiñón, estaba harto de caerme y también de chocarme con los champiñones". Sí, es un poco frustrante eso de no pasar un nivel. Por eso yo, aunque a veces me he entretenido con algún videojuego, suelo abandonar rápido. ¡Y eso que soy muy tenaz! Pero no con los videojuegos...
  • Pablo S: "Nunca me he aburrido". Haizea, Toni y Luis dijeron lo mismo. Bueno, ¡pues será que sabéis cómo invertir vuestro tiempo!
  • Biel: "Cuando estamos en el mercado un montón de tiempo, le pido a mi madre: ¿Cuánto queda para que nos vayamos? Y me dice: Ahora... Y otra vez tenemos que estar un montón de rato". ¡No, hombre, no! Con la de cosas que hay que hacer en un mercado o supermercado, no debes aburrirte. Ayuda a tu madre a hacer la compra, lleva el carro o la cesta, aprende el nombre de nuevas verduras, carnes o pescados, calcula precios, ayuda a pagar... ¡Pero si puede convertirse en una auténtica aventura!
  • Carlos S: "Cuando iba en barco con mi tío, estaba esperando a pescar un atún, y cuando me picó, estiré y me salió un pez y era un atún. Estuve una hora para cogerlo y me aburrí tanto esperando...". Eso es porque todavía no has descubierto los encantos de la pesca. O eso dicen, que yo tampoco los conozco ;-)
  • Nico: "Un día fui a un sitio con unos amigos de mis padres y estaba muy lejos, y tardé 5 horas, y me dormí 10 horas, y me aburrí de tanto dormirme". ¿Ves como el tiempo, cuando te aburres, se estiiiiiira? Seguro que no tardaste 5 horas, y lo que te puedo asegurar ¡es que no dormiste 10! ¡Jajajaja!
  • David: "Cuando juego con el ordenador al Counter-Strike con mi padre, siempre me mata, con una metralleta, y me aburro de que me mate tantas veces". A ti te pasa lo contrario que a Marc, que se aburre de tanto ganar. Pues a ti te digo también lo contrario: ¡Busca otro tipo de juego en el que creas que vas a poder ganar a papá!

¿Y vosotros? ¿Os aburrís con frecuencia? Yo ya os digo que no tengo tiempo. ¡Siempre tengo mil cosas que hacer!

En breve, ¡una nueva emoción!

* Aunque yo no voy a utilizar las fichas de actividades porque mis alumnos son muy pequeños, aquellos que trabajéis el emocionario con niños de más edad, disponéis de unas fichas de trabajo preparadas para realizar después de cada emoción. Aquí podéis descargar la ficha del aburrimiento.

Flying into summer

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Hoy os traigo un post muy cortito. Simplemente os quiero enseñar el mural que han preparado los niños con Violeta en clase de Arts&Crafts: Flying into summer. Y es que queda un mes para que acaben las clases. Entramos, ya, en la recta final. ¡Me parece increíble! A mí este curso me ha pasado volando. ¡Eso es que he disfrutado mucho!



Como sabéis, este curso 2014-15 hemos estado trabajando el Proyecto Los aviones dentro del proyecto de centro Los inventos. Así que muchas de las actividades que han realizado los alumnos han estado relacionadas con este tema. ¡Y plástica no podía ser menos! Así que gracias, Violeta, y ¡gracias, niños, por vuestro arte!

¡Y más aportaciones de mis alumnos!

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Como ya habéis visto en otros posts, mis niños no paran de traer cosas a clase para compartir con sus compañeros, ¡especialmente libros! Así que hoy os voy a mostrar las últimas aportaciones de mis alumnos. Traen tantas cosas que, cuando me despisto, tengo un montón de fotos acumuladas :-)

Adrián volvió a colaborar con nuevos cromos a nuestro álbum de clase. ¡Muchas gracias! Toni nos enseñó su álbum, ya que él también realiza la colección en casa.


Lola nos enseñó uno de sus libros: Perla y los ratones traviesos.

Todo el mundo ha oído hablar de las hadas que viven al fondo del jardín. Pero, ¿sabéis que las hadas también viven en la gran ciudad? ¡Pues claro que sí! Aquí tenemos a Perla, el hada del parque. Perla se encarga de cuidar el Parque de la Alegría y eso la tiene muy ocupada. Pero un buen día se levanta y lo encuentra todo revuelto. ¡Por todas las estrellas! ¿Qué puede haber pasado? La divertida y hacendosa Perla lo tendrá que descubrir...

Aquí si queréis adquirir Perla y los ratones traviesos

¿Os gustaría aprender a dibujar dragones? Teo nos trajo este libro en el que, además de aprender a dibujar dragones, descubrimos muchas curiosidades sobre ellos. Dragones para dibujar es un libro para disfrutar, ¡además de para convertirse en unos artistas!


Aquí si queréis adquirir Dragones para dibujar

¿Os habéis preguntado alguna vez cómo es un día de las Princesas Disney? El libro de Claudia, Tiempo de princesas, nos lo desvela, a la vez que podemos practicar colocar las horas en las agujas el reloj.


Óscar trajo un cuento a clase que leímos íntegramente. Muchas veces traen otra tipología de libros y no los podemos leer, pero cuando traen un cuento ¡siempre lo disfrutamos mucho! Nos encantó Te quiero (casi siempre), de Ana Llenas, la misma autora del famoso cuento El monstruo de colores, que trabajamos en clase dentro del Proyecto Cuéntame un cuento. Podéis recordar la presentación del cuento y nuestra experiencia con él (videocuento incluido).

¿Por qué una misma característica de una persona hace que a veces nos guste y otras nos moleste? Lolo y Rita son muy distintos entre sí. Aceptar la diversidad no es siempre fácil… ¿Pero quién dijo que lo iba a ser? Un libro para niños y mayores que invita a la comprensión de aquello que nos hace diferentes, mostrando el mágico efecto de los polos opuestos…Una deliciosa historia de amor para todas las edades.


¿Os acordáis del gran álbum para dibujar, colorear y garabatear que os enseñé? Pues Lola trajo uno de la misma editorial: Gran libro para buscar y colorear un montón de cosas. Tiene el mismo estilo chulísimo, sólo que en este hay menos lugar para la improvisación. Eso sí, la observación a tope (algunas páginas me recuerdan al famoso ¿Dónde está Wally?). Los dibujos, una vez más ¡son geniales!



Bruno trajo un libro de lectura: David y el monstruo pierden un tesoro.

El monstruo vuelve de visita a casa de David para jugar, ya que es lo que más le gusta a los dos. Además, en esta ocasión el peculiar amigo del niño trae un saco grande colgado del hombro. ¿Qué será lo que hay allí dentro? Una historia llena de humor que muestra la importancia del civismo y la cooperación.



Toni trajo un libro de misterio, La Mano Verde, de la colección Ratón de biblioteca.

A Nacho no le gusta su nuevo colegio. Su clase es vieja, oscura y tiene corrientes de aire... ¡Incluso dicen que está encantada! Aunque en ella no se aparece un fantasma convencional. En la clase de Nacho se aparece... ¡una MANO VERDE! ¿A quién pertenece la Mano Verde? ¿Y por qué escribe frases desagradables en la pizarra? 


Keyla trajo a clase una colección de cuentos clásicos, con CD, en catalán: La bella durmiente, Cenicienta, La sirenita y La cigarra y la hormiga. No necesitan descripción, ¿verdad?

Aquí si queréis adquirir esta colección

Nico compartió con nosotros un cómic de los famosos Zipi y Zape. ¿Quién no ha disfrutado alguna vez de sus travesuras? De pequeña, era mi sección favorita de los cómics, junto con Rompetechos y Rue del Percebe 13 :-)


Haizea trajo a clase un libro de nuestro exitoso personaje: Junie B. Jones tiene un hermano monísimo. Este número, además, lo leímos íntegramente en clase hace unos meses.

Junie B. Jones es... ¡la niña más superdivertida! ¡Los bebés huelen a KK! Eso es lo que piensa Junie B. Jones al enterarse de que va a tener un hermanito. Pero cuando la abuela le dice que el bebé es «lo más mono» que ha visto en su vida,  Junie B. cambia de idea. ¡Un hermanito mono, como los de la selva! Ya verás cuando lo cuente en clase... ¡Todos se van a quedar patitiesos!



Y días después compartió con nosotros El traje nuevo del emperador, un formato de libro con letra ligada, fácil de leer, ideal para primeros lectores que acaban infantil o empiezan primaria (ahora, mis niños, son unos campeones y leen letra de imprenta con mucha fluidez).

El emperador amaba tanto la elegancia que solo pensaba en bellos trajes. No gobernaba, no iba a cazar: quería solo los tejidos más preciados, los sastres más hábiles, y trajes nuevos, cada vez más hermosos.


Aquí si queréis adquirir El traje nuevo del Emperador

Teo, gran fan de Junie B. Jones, trajo dos libros de la colección, uno en catalán y otro en castellano: Junie B. Jones desdentegada (Junie B. Jones la desdentada) y Junie B. Jones es una espía. Esta última portada me trae muchos recuerdos, porque una vez, en el anterior colegio, hicimos una comparsa de disfraces de libros para participar en la Rua de Calvià. Llevé a mi hija a participar con nosotros y, cómo no, eligió un libro de Junie B. Jones. El libro nos quedó chulísimo (ella iba dentro) y la verdad es que nos esforzamos mucho en el diseño. De hecho, llevaba un calcetín de verdad colgando del cesto de la ropa, junto con otras prendas... Yo iba de La Sirenita.  No hay nada pintado, todo son trozos de tela pegados sobre el libro. Aquí tenéis unas fotos de los disfraces, aunque lo que he podido encontrar es de bastante mala calidad...


¡A Junie B. Jones se le mueve un diente! Y no es un diente cualquiera... Es uno de los de delante. A Junie B. no le hace ni pizca de gracia, porque... ¿y si, cuando por fin se le caiga, parece un bicho raro y se ríen de ella? Además, todo eso del ratoncito Pérez es de lo más misterioso... ¿Quién es en realidad ese ratón? ¿Y para qué quiere todos esos dientes? ¡Buf, cuántas preguntas!

Junie B. es la espía más sigilosa (y también la más cotilla) del mundo: Sabe andar sin que nadie la oiga, sabe respirar sin hacer ruido por la nariz. Lo malo es que estos truquitos de nada le sirven cuando se trata de espiar a la Seño. Y es que esta vez Junie B. va a meterse en el lío más gordo de todos-todísimos...



Aquí si queréis adquirir Junie B. Jones, desdentegada
y aquí si queréis Junie B. Jones, la desdentada

Aquí si queréis adquirir Junie B. Jones es una espía

Lola, en las fechas del día del libro, nos trajo a clase La llegenda de Sant Jordi 3D. ¡Genial para recordar la tradición que envuelve este día!

Fa molt i molt de temps, el poble de Montblanc era devastat per un monstre ferotge i terrible, que podia caminar, volar i nedar, i tenia un alè tant pudent, que des de molt lluny amb les seves alenades enverinava l'aire i produïa la mort a tots els qui el respiraven. El monstre era l'estrall dels ramats i les persones, i per tota aquella contrada regnava el terror més profund. Preocupats per la situació, els habitants de Montblanc van pensar en donar al drac, cada dia de menjar a una persona, per intentar calmar-lo. El problema, era trobar la persona que vulgues sacrificar-se cada dia per ser devorada pel drac. 


Aquí si queréis adquirir La llegenda de Sant Jordi 3D

Giulia trajo a clase la Guía ilustrada del cuerpo humano, un completo libro para aprender muchísimas cosas sobre nuestro fascinante cuerpo.

¿Qué es una neurona? ¿Para qué sirve el pelo? ¿En qué lugar del cerebro se guardan los recuerdos? Nuestro cuerpo está lleno de misterios fascinantes que podrás descubrir en este libro. También encontrarás en él una descripción detallada de los principales órganos de nuestro cuerpo, así como la función que desempeñan y cómo trabajan. ¿Por qué los niños son más flexibles? ¿Por qué distinguimos los alimentos salados y azucarados? ¿Por qué a veces nos duelen los dientes? ¿Cómo nacen los bebés? ¡Todo eso y mucho más!


Aquí podéis adquirir la Guia Ilustrada Cuerpo Humano

¿A qué niño no le gustan los camiones? Carlos trajo un libro que nos cuenta todo sobre ellos: El gran libro de los grandes camiones y otros más pequeños. ¡Mirad qué orgulloso nos lo cuenta!

Descubre los camiones más grandes y potentes del mundo, desde los volquetes más gigantescos hasta las grúas móviles más altas.


Aquí si queréis adquirir El gran libro de los grandes camiones y otros más pequeños...

Y acabo el post con otras dos aportaciones que no son libros ¡sino súper premios! Si ya os digo yo que mis niños son unos campeones, pero en este caso, además, de manera oficial. ¡Son unos verdaderos champions!

Aquí tenéis a Bruno mostrando orgulloso su copa como tercer clasificado de su categoría (Tiny Tots) en el campeonato de Aloha Mental Arithmetic celebrado en Mallorca. ¡Enhorabuena, crack!


Y aquí a Keyla luciendo sus dos medallas del campeonato de gimnasia deportiva de Mallorca. ¡Quedó primera de su categoría! ¡Enhorabuena, artista!


Y aunque tengo más libros para enseñaros, lo dejamos para otro post.

¡Espero que os guste todo lo que mis niños aportan al aula!

Emocionario: ILUSIÓN

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Ya estoy de vuelta después de un fin de semana estupendo de desconexión para celebrar mi aniversario de bodas :-) Y, vuelvo, cómo no, con una nueva experiencia de nuestro Proyecto Emocionario. Hoy vamos a hablar de la ilusión.



La ilusión es la esperanza de que se cumplirá algo que deseamos. Tener ilusiones es una de las mejores maneras para disfrutar de la vida y hacer las cosas con energía.

El emocionario nos hace una pregunta que nos hace reflexionar: ¿Las cosas tienen ilusión o nosotros ponemos ilusión a las cosas? Podemos ponerle ilusión a casi todo: a tener un hermano, a celebrar nuestro cumpleaños, a ir al colegio, a jugar con los amigos... ¡Hasta a hacer los deberes! Estuvimos hablando bastante sobre esto. ¿Cómo creen mis alumnos que voy yo al colegio todos los días? Estuvieron todos de acuerdo que con ilusión (¡uf! ¡menos mal! :-) ¿Habría el mismo clima en el aula si no pusiera ilusión a las cosas que hacemos día a día? ¿Tendríamos un aula bonita, decorada y ordenada? ¿Disfrutaríamos cada día de todo lo que aprendemos? Está claro que no. Con eso no quiero decir que nuestra clase sea un lugar idílico donde todo es maravilloso el 100% del tiempo. Por supuesto, tenemos mejores momentos y peores. Y como en toda convivencia, se generan conflictos que aprendemos día a día a resolver. Hay días de más y de menos paciencia, por su parte y por la mía, porque eso es inherente al ser humano. Y días más y menos ajetreados. Pero eso no quita que yo, cada día, voy al trabajo con ilusión. ¡Porque cada día es una oportunidad nueva de aprendizaje y de crecimiento personal! La ilusión es, por tanto, un ingrediente con el que damos sabor a la vida. El menú nos lo vamos a tener que comer igual, ¿verdad? ;-)

Cuando estamos ilusionados, nos prende el entusiasmo.

¿Y qué les hace ilusión a mis niños? ¿Recuerdan alguna experiencia en la que hayan sentido especial ilusión?

  • Óscar: "Un día, cuando ya era casi el cumpleaños de mi madre, me enseñó fotos del hotel (al que iban a ir a celebrarlo) y estaba ilusionado". ¡Claro, no hay nada como vivir nuevas experiencias!
  • Biel: "Cuando casi ya era mi cumpleaños, tenía mucha ilusión de que me diesen los regalos". Más tarde, volvió a intervenir diciendo: "Un día que íbamos a ir a un hotel que tenía un jacuzzi y tenía mucha ilusión". ¡Otro que se lo pasa pipa en los hoteles!
  • Bruno: "Cuando estaba en Valencia y era el día de Papá Noel, me hizo mucha ilusión que me trajera un juego de imposibles". ¡Cómo le gustan los retos a Bruno!
  • Eric ha sentido ilusión "cuando era mi cumple, venían los Reyes y Papá Noel". Claro, es que Eric cumple los años en diciembre, y se le juntan todos los acontecimientos importantes del año :-)
  • Lola: "Tengo ilusión de cuando sea mi cumple" (cuando hicimos la sesión, quedaban dos días para el cumpleaños de Lola). ¡Claro que sí! ¡El cumpleaños es un día súper especial para todos los niños! (para los adultos también, aunque algunos empiezan a querer perder la cuenta a partir de los 40...).
  • Claudia: "Cuando Papá Noel, en Navidad, me trajo los regalos, antes de dormirme sentí mucha ilusión". ¡Ay, la magia de la Nochebuena!
  • Giulia: "Un día, cuando estaba de viaje en Italia con mi padre y mi hermana, echaba de menos a mi familia". Entonces yo le pregunté: "¿Y dónde está la ilusión?". Y me contestó: "Me ilusionaba al pensar en estar de nuevo con mi familia". Me emocioné y todo.
  • Teo siente ilusión "cuando ya casi me voy a Bulgaria" (o sea, cuando le queda poco para irse). Y es que no hay nada como viajar a ver a la familia.
  • Keyla: "Lo mismo que Claudia".
  • Carlos S: "Hoy tengo mucha ilusión porque cumplo los 7 años el 4 de junio". ¡Ahí, con el punto de mira bien claro!
  • Haizea siente ilusión "cuando faltan muy pocos días para irme a San Sebastián". Otra a la que se le ilumina la cara cuando habla del lugar al que viaja habitualmente para visitar a su familia.
  • Carlos G: "Cuando probé el Bahía, que es un barco, me gustó un montón y quería ir otra vez". ¡Bravo, marinero!
  • Nico: "Cuando mi padre me iba a comprar una cosa que yo quería, tenía mucha ilusión de que me la comprase".
  • Marc: "Cuando salía un anuncio de un juego de Mario Bros, La última aventura, yo decía: ¡Mami, mami, quiero esto!". Es decir, que le hacía ilusión que se lo compraran.
  • Marco: "Cuando todavía no estaba nunca en casa de mi padre, me hacía mucha ilusión ir a casa de mi padre por primera vez". Más tarde, volvió a intervenir: "Cuando era mi cumpleaños, mi padre me hizo una tarta y yo estaba ilusionado por verla".
  • Ares: "Tengo ilusión de ir a un restaurante de lujo, porque me dijo mi madre que me iba a llevar cuando tenga 8 años. Y me falta sólo uno". Le pregunté qué restaurante era, por eso de probarlo yo también, y me dijo que el "Naan". ¡Habrá que investigar! También más tarde, volvió a intervenir: "Cuando era mi cumpleaños e iba a venir toda mi familia, estaba muy ilusionado de que vinieran".
  • Pablo S: "Un día, la abuela Ana de Chile vino con tres billetes para un crucero. Me hizo mucha ilusión". ¡Qué espléndida la abuela Ana!
  • Lola: "Cuando fue mi cumpleaños mis padres me hicieron un regalo que no era para ese día, un viaje a Disneyland París, y tenía mucha ilusión". ¡Ese viaje a Disney fue lo más! ¡Ha salido ya en un montón de sesiones del emocionario!

Después, hablamos sobre las cosas a las que les ponemos ilusión. ¿Queréis saber qué hacen mis alumnos con ilusión?

  • Keyla: "Voy a natación con ilusión".
  • Nico: "Cocino con ilusión".
  • Marco pone ilusión "cuando cocino con mi prima".
  • Biel: "Voy al fútbol con ilusión".
  • Carlos S: "Hago los deberes con ilusión". Haizea y Ares dijeron que también. ¡Y así les salen de bien!
  • Óscar: "Juego con ilusión los partidos de fútbol".
  • Lola: "Hace el kumon con ilusión". Y yo le pregunté: "¿Pero la semana pasada no dijiste que los deberes de kumon eran un aburrimiento?". Y me contestó: "Sí, pero también los hago con ilusión". Fenomenal, Lola, esa es la actitud. Ilusión ante todo, aunque luego resulte que te aburres un poco...
  • Marc preparó una tarta con ilusión: "Cuando estaba preparando con mi padre una tarta para mi madre, tenía mucha ilusión por probarla y por darle una sorpresa a mi madre".
  • Ares le pasó algo parecido: "Cuando es el cumple de mi madre, le hago la tarta yo solo, con ilusión".
  • Marco: "Juego con Adri con ilusión".

¿Y vosotros, qué hacéis con ilusión? ¡Espero que algo que forme parte de vuestro día a día, así seguro que será mucho mejor!

En breve, ¡una nueva emoción!

* Aunque yo no voy a utilizar las fichas de actividades porque mis alumnos son muy pequeños, aquellos que trabajéis el emocionario con niños de más edad, disponéis de unas fichas de trabajo preparadas para realizar después de cada emoción. Aquí podéis descargar la ficha de la ilusión.

Aquí si quieres adquirir el libro Emocionario.

El día y la noche

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En clase de ciencias sociales estamos trabajando un tema que nos está encantando: el día y la noche.

Un ejercicio muy sencillo y que ayuda a los niños a entender a la perfección cómo funciona, se realiza con una linterna. Lola y yo hemos hecho de Sol y de Tierra respectivamente.

Lola se ha puesto de pie, alumbrándome con la linterna de mi móvil. El Sol es una estrella, por lo que tiene luz propia. Yo, que representaba a la Tierra, me he puesto de pie, delante de Lola. Como la Tierra es un planeta, no tiene luz propia, así que la parte que está iluminada es porque recibe la luz solar. Hemos supuesto que uno de los botones de mi camisa era España, que en ese momento estaba totalmente iluminado, por tanto, en esa zona (y en el resto de la parte delantera) sería de día. En cambio, mi espalda estaba a la sombra,  allí no llegaba la luz de la linterna, por lo que en toda esa zona sería de noche. Entonces he empezado a rotar sobre mí misma. La luz cada vez daba a mi botón de manera más indirecta (iba anocheciendo) hasta que ha quedado totalmente a la sombra. En ese momento, yo daba la espalda a Lola, y mientras en nuestro país es de noche, en el otro lado de la Tierra es de día. A medida que seguía girando, volvía a dar la luz poco a poco a mi botón (empieza a amanecer) hasta volver a quedar con el Sol totalmente de frente (mediodía). Se entiende, ¿verdad? ;-)

Me sabe mal no haber hecho fotos, pero o mi móvil hacía de linterna o hacía de cámara de fotos, y he optado por la primera opción. De todas formas, en esta imagen se ve perfectamente.


Hemos visto que la Tierra tarda 24 horas (1 día) en realizar este giro sobre sí misma, y que a ese movimiento se le llama rotación. La rotación es la que origina los días y las noches. Pulsando sobre la siguiente imagen, podréis ver una explicación animada.



Y en la imagen siguiente, podréis realizar un pequeño ejercicio para ver si se ha entendido.


Pero no podía hablar de un movimiento de la Tierra sin hablar del otro (aunque no salga en el libro), así que una vez entendido el movimiento de rotación de la Tierra, he empezado a dar vueltas, caminando, alrededor de Lola. Les he explicado que la Tierra, además de dar vueltas sobre sí misma, da vueltas alrededor del Sol.



La Tierra tarda 365 días (1 año) en realizar esta vuelta alrededor del Sol, y a este movimiento se le llama traslación. La traslación es la que origina las estaciones del año (primavera, verano, otoño e invierno). Pulsando sobre la siguiente imagen, podréis ver una explicación animada.



Y en la imagen siguiente, podréis realizar un pequeño ejercicio.



Y como los dos movimientos se dan a la vez, pues me he puesto a girar sobre mí misma al tiempo que giraba alrededor de Lola, con el consiguiente mareo por mi parte y las buenas risas de los niños. Pero creo que lo han entendido. Además, lo hemos comparado con un movimiento que conocen muy bien. Ahora ha pasado la moda, pero durante el primer trimestre de curso causaron furor las peonzas. Y las peonzas, depende de cómo se lancen, dan vueltas sobre sí mismas, al mismo tiempo que dibujan círculos en el suelo. Esos serían, de alguna manera, los movimientos que realiza la Tierra.

Y por si no tuviésemos suficiente con la Tierra y el Sol, hemos añadido un tercer elemento: la Luna, el satélite de la Tierra. La Luna, por su parte, da vueltas alrededor de la Tierra.


Como vemos en el dibujo, la Luna no va variando de tamaño ni desapareciendo. Una vez más, lo que nosotros vemos de la Luna desde la Tierra, es la parte iluminada por el Sol (los satélites tampoco tienen luz propia). Y esa parte que vemos, va cambiando en función de la posición de la Luna y la Tierra respecto al Sol.

La Luna tarda 28 días en dar la vuelta a la Tierra, originando las fases lunares.

Y como no podía ser de otra manera, también lo hemos representado. Keyla, que hacía de Luna, ha empezado a dar vueltas alrededor de mí (Tierra). Yo he empezado a dar vueltas sobre mí misma a la vez que vueltas alrededor de Lola (Sol), mientras Keyla seguía dando vueltas a mi alrededor. Mis alumnos reían y decían: "¡Cuántas vueltas!". Pues sí, jeje, en el universo las cosas funcionan así: los planetas giran alrededor de las estrellas y los satélites giran alrededor de los planetas. Y el recorrido que realizan se denomina órbita.

Mucha información, ¿verdad? Pues aún hemos ido más allá. Porque si en una parte de la Tierra es de día y en la otra parte es noche cerrada ¿puede ser la misma hora? Vaya... desde luego no parece muy práctico, porque eso de irse a dormir cuando amanece y levantarse cuando anochece...

Entonces hemos abierto esta página web en la que, de una manera muy visual, podemos entender los husos horarios.


Si pulsáis sobre la imagen, podréis verla en acción. A medida que vas moviendo el cursor por las diferentes zonas de la Tierra, vas viendo qué hora es en cada lugar. Además, la parte iluminada muestra las zonas donde es de día, y la más oscura donde es de noche. La captura de la imagen la he hecho ahora, mientras escribo este post, pero esta mañana, en clase, la distribución de la parte iluminada y oscura era muy diferente. Les ha sorprendido mucho ver que en nuestro país eran las 11 de la mañana y en Nueva York, por ejemplo, las 5 de la mañana, por lo que los neoyorkinos aún estaban durmiendo. Decían: "¡Alaaaa!". Y ya no os digo cuando me he ido a la Polinesia Francesa (Papeete) donde marcaba las 11 de la noche. "¡Van al revés que nosotros!". Y el jet lag es insufrible, ¡os lo digo yo!

También hemos experimentado el día y la noche con la linterna de mi móvil apuntando a un globo terráqueo. Hemos estado buscando diferentes países en los que es de noche mientras en España es de día. Dando vueltas al globo terráqueo y viendo cuáles eran las zonas iluminadas y oscuras ¡ha sido pan comido!

Y en este punto sí que no hemos seguido avanzando. Creo que ha sido una intensa y fructífera sesión de astronomía :-)

Y aquí os dejo más material interactivo para seguir reforzando y profundizando en lo que hemos aprendido.

Pulsa sobre la imagen para ver los movimientos de la Tierra y la Luna.


Y pulsa sobre la siguiente para realizar un ejercicio.


¡Ahora un pequeño test!


Y para los que quieran ampliar conocimientos, ¡aquí tenéis más material! Pulsad sobre cada imagen para acceder a las actividades.











Ahora un último ejercicio para comprobar que hemos adquirido todo el vocabulario y que sabemos identificar los diferentes elementos.


Y para acabar, unos vídeos muy cortitos ¡que seguro que nos lo terminan de dejar todo muy clarito!




¡Espero que os haya gustado esta sesión de astronomía para niños!

Cumpleaños de mayo: Lola

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El jueves pasado hicimos la fiesta/merienda correspondiente a los alumnos que celebran su cumpleaños en el mes de mayo. En este caso la homenajeada sólo es una: Lola. ¡Muchas felicidades, princesa!


Lola, que cumplió 7 años, trajo para la fiesta dos bizcochos caseros (¡deliciosos!) y dos bolsas gigantes de patatillas. Yo no probé el bizcocho, pero tengo que decir que era súper esponjoso y olía fenomenal. De hecho, mis niños lo dijeron reiteradamente: "¡Qué bueno está este bizcocho!", "¡Está riquísimo!", "¿Puedo repetir?". Pero no pudieron, no, ya que lo corté en 24 generosos trozos, y el que sobró, le dije que se lo llevara a su hermano pequeño (faltaban dos alumnos). Así que enhorabuena al repostero correspondiente, que supongo que fue la mamá de Lola, pero como hoy en día los papis también son unos cracks en los fogones... ¡pues felicidades a quien los elaborase!

Aquí tenéis el vídeo homenaje con todas las fotos y los fragmentos de vídeo que grabé. Como no teníamos vela, no pudo soplar, pero le cantamos "cumpleaños feliz" igualmente, y al acabar la canción, pidió un deseo y nos lanzó un súper beso lleno de energía. Lolita, te deseo que cumplas muchos más y que no dejes nunca de ser la dulce, alegre y maravillosa persona que eres. ¡Felicidades!


Emocionario: ENTUSIASMO

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Entramos en la recta final del Proyecto Emocionario con una nueva emoción: el entusiasmo. La primera cosa que quiero contaros con orgullo del entusiasmo, es que mis alumnos siempre se han mostrado entusiasmados con la realización de este proyecto (¡y yo con ellos!), desde que lo empezamos a principio de curso y durante todas las sesiones que hemos realizado. ¡Creo que ya puedo asegurar que conservarán el entusiasmo hasta la última emoción! :-)




Para ayudarles a descubrir de qué emoción se trataba, les hice fijarse bien en la ilustración. Una jaula... parece que se ha abierto... los pajaritos vuelan libres... ¿Qué sentirán?

- "¡Alegría!" - dijo Haizea. Sí, alegría seguro que sienten, pero esa emoción ya la hemos visto. Se trata de otra.
- "¡Entusiasmo!" - exclamó Bruno. Voilá, creo que estos pajaritos están entusiasmados.

Vimos que el entusiasmo es la exaltación del ánimo por algo que causa interés, admiración o placer (Mostró mucho entusiasmo al enterarse de la noticia). También es poner mucho interés en algo, que nos lleva a poner en su logro mucho esfuerzo y empeño (Puso todo su entusiasmo en conseguirlo). Para los griegos, el entusiasmo es "el despertar del dios que tenemos dentro". Cuando nos dejamos llevar por él, nos sentimos todopoderosos. Entonces, el entusiasmo suena como una música, porque el corazón late a un ritmo especial. Animados por esa música, fácilmente llegamos a la euforia.

El entusiasmo puede entenderse como el motor de nuestro comportamiento. Quien está entusiasmado con algo, se esfuerza y muestra una actitud positiva.

La felicidad y el bienestar interior se asocian al entusiasmo, por lo tanto ¡pongamos entusiasmo en nuestras vidas! Es cierto que hay acontecimientos que nos ayudan a sentirnos entusiasmados, pero más cierto es que el entusiasmo puede surgir sin que existan motivos específicos o concretos. Cuando tenemos una actitud alegre y positiva, solemos afrontar el día con un entusiasmo espontáneo, que parece ser un rasgo de nuestra personalidad.

El entusiasmo, por otro lado, va ligado a la vocación. ¿Será por eso que siempre muestro entusiasmo en mi trabajo? ;-)

Os aconsejo tener cuidado con el estilo de vida moderno, tan vinculado al consumismo, que puede conducirnos a una espiral de inconformismo y decepción ante la idea de no poder alcanzar nuestros objetivos, tanto a nivel emocional como profesional. Por tanto, no debemos permitir que la sociedad nos dicte cuáles son nuestras necesidades o qué nos debe hacer felices. Si estas elecciones no son propias, llegará un punto en que perdamos nuestro entusiasmo y nuestra realidad se desmorone. En cambio, si escuchamos a nuestra voz interior, sabremos cuáles son nuestros objetivos y necesidades reales, por las que lucharemos cada día con entusiasmo.

¿Y qué me contaron mis niños sobre el entusiasmo? ¡Aquí tenéis sus aportaciones!

  • Lola: "Hoy estoy entusiasmada porque mañana es mi cumple". ¡Ay, esos cumpleaños! ¡Cuánta ilusión! Hablamos de ellos la semana pasada.
  • Ares: "Estoy entusiasmado porque mañana por la tarde me voy a Katmandú (parque temático)". ¡Seguro que lo pasas genial!
  • Pablo C: "Hoy estoy entusiasmado porque mañana nos iremos a Natura Parc". ¡Y lo bien que nos lo pasamos! Aquí tenéis el post en el que os lo cuento todo sobre esta salida.
  • Claudia: "Estoy entusiasmada porque el sábado tenemos inglés Lola, Haizea y yo, y hacemos muchos juegos divertidos". ¡Esas clases deben ser lo más!
  • Toni: "Estoy entusiasmado cuando voy de viaje". ¡Y yo! ¡Y yo! ¡Me encanta viajar!
  • Giulia: "Hoy estoy entusiasmada porque dentro de poco es el cumple de mi madre". ¡Y seguro que el mejor regalo para tu mamá es que compartas ese entusiasmo con ella!
  • David: "Estoy entusiasmado por ir a la piscina hoy y bañarme con mi padre". ¡Qué buenos momentos en familia!
  • Jaime: "Estoy entusiasmado porque ya viene mi cumple". ¡Claro que sí! ¡Los cumples hay que celebrarlos!
  • Marc: "Cuando mi madre me dice que voy a ir a casa de unos amigos, siento entusiasmo y digo: ¡Qué bien, qué bien! ¡Me voy a divertir mucho!". No hay nada como pasar grandes momentos con los amigos. ¡Y eso que a ti no te faltan hermanos para divertirte!
  • Carlos G: "Cuando me voy a Fuerteventura y me voy a la playa con el bodyboard estoy entusiasmado porque me gusta mucho". Primero el barco y ahora la tabla. ¡Cómo te gustan los deportes acuáticos!
  • Marco: "Estoy entusiasmado de que se me caiga un diente". ¿Y esperar al ratoncito Pérez? ;-)
  • Haizea: "Cuando voy a un restaurante estoy entusiasmada". ¡Tú sí que sabes! Está fenomenal disfrutar de buenos momentos de ocio rodeados de buena gastronomía.
  • Keyla: "Estoy entusiasmada para que sea jueves y hagamos Valors i religió". Eso es porque en la clase de valores también hablamos largo y tendido sobre temas interesantes :-)
  • Pablo S: "Un día, cuando me fui a la feria, estaba entusiasmado de ir, y gané una gorra en un juego". "¿Era una tómbola?", le pregunté. "No, era un juego de disparar verde contra naranja y me tocó el verde". Yo, cuando era niña, también esperaba con entusiasmo ir anualmente a la Fira del Ram. Ahora comparto el entusiasmo con mis hijos ;-)
  • Suyay: "Estoy entusiasmada porque otro día voy a hacer algo importante". Entonces le pregunté: "¿Y puedes compartir con nosotros, si te apetece, eso tan importante que vas a hacer?". "Montar a caballo", añadió. ¡Aaaah, montar a caballo! ¡Súper importante! Normal que te sientas entusiasmada...
  • Eric: "Cuando, con mi padre, mi hermano y yo fuimos a la feria, yo estaba entusiasmado". Si ya lo hemos dicho antes. ¡Nos entusiasman los parques de atracciones!
  • Adrián: "Cuando me fui a dormir a casa de mis abuelos estaba entusiasmado". Eso es que tienes unos abuelos estupendos. ¡Desde aquí un aplauso a la inigualable labor de los abuelos!
  • Carlos S: "Estoy entusiasmado porque falta poco para mi cumple". ¡Y lo celebraremos por todo lo alto!
  • Biel: "El año pasado, cuando mis padres me iban a comprar una cosa, estaba entusiasmado". "¿Y quieres contarnos qué era?", le pregunté. "Un juguete", respondió. Está claro que ese juguete te hacía mucha ilusión, de ahí que mostraras tanto entusiasmo.
  • Bruno: "Cuando estaba en Cuenca con mis primos, estaba entusiasmado porque fuimos a un puente y al otro lado había un hotel. Hicimos fotos y un powerpoint". Eso es que el paisaje era muy pictórico. ¿Las famosas casas colgantes de Cuenca?
  • Teo: "Estoy entusiasmado cuando mi padre promete que va a jugar a la Play conmigo". Y es que compartir nuestras aficiones con los que más queremos no tiene precio.
  • Óscar: "Estoy entusiasmado de ir a Xuño". ¡Ay! ¡Me voy a tener que ir a conocer ese encantador pueblo del que siempre hablas con cariño!
  • Luis: "Cuando me voy a Valencia y veo a mis primos estoy entusiasmado". ¡La familia es uno de los pilares de nuestra vida!

¿Y vosotros? ¿Sentís entusiasmo en vuestro día a día? Yo hoy he recibido una noticia con entusiasmo. El portal educativo Tiching se ha fijado en mi trabajo. Podéis ver sus recomendaciones y la mención a mi blog aquí.

En breve, ¡una nueva emoción!

* Aunque yo no voy a utilizar las fichas de actividades porque mis alumnos son muy pequeños, aquellos que trabajéis el emocionario con niños de más edad, disponéis de unas fichas de trabajo preparadas para realizar después de cada emoción. Aquí podéis descargar la ficha del entusiasmo.


Vídeos y reflexión sobre la importancia de la educación emocional

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Hoy quiero compartir con vosotros dos vídeos que dejan más que patente la importancia de la educación emocional en los niños y que deberían hacernos reflexionar.

Ya he dicho en más de una ocasión que lo más visitado en mi blog es el Proyecto Emocionario. ¿Por qué será? Sin duda, muchos profesores y padres ya vemos la educación emocional como algo imprescindible en el desarrollo integral del niño. Numerosos estudios constatan sus múltiples beneficios. No voy a hacer un listado de ellos, porque los siguientes vídeos lo explican mucho mejor de lo que lo podría hacer yo.

En el primer vídeo, muy cortito y fácil de ver, vemos un ejemplo de educación emocional aplicada en la escuela con niños de 3 años. ¿No os convence por completo?


Y en el siguiente vídeo, de la mano de Eduard y Elsa Punset (algo más largo pero que os recomiendo encarecidamente ver), tenemos una visión mucho más completa de todo lo que supone para nuestros niños y adolescentes recibir programas de educación emocional y social.


Por cierto, en el vídeo podemos ver que hablan del cuento El monstruo de colores, que trabajamos dentro de nuestro Proyecto Cuéntame un cuento :-)

No sé por dónde empezar... (si habéis visto los vídeos entenderéis mejor lo que viene a continuación). Yo veo estos vídeos y me produce una mezcla de sentimientos contradictorios. Lo primero que siento es muy positivo, un enorme impulso de aprender más y más. Quiero poder ofrecer lo mejor que tenemos a nuestro alcance a mis alumnos. Pero por otro lado, siento mucha decepción. Vamos, que se me queda cara de tonta y siento que estamos taaaaan lejos de lo que podríamos hacer en las escuelas... Me dan ganas de coger a los responsables de educación de este país, zarandearlos un poco y decirles: "¿A qué estamos esperando? ¿No tenemos suficiente información a nuestro alcance que corrobora los beneficios de estos programas?". Pero no sé qué pasa. Mucho hablar de innovación educativa y de competencias básicas, pero yo lo que veo es que quien no se "saca las castañas del fuego" por él mismo, se ve inmerso en una escuela tradicional de la que no hay forma de salir. Y ahí estamos, cambiando leyes educativas a diestro y siniestro sin avanzar hacia ningún lado :-(

Pido disculpas por el tono reivindicativo de este post que no es para nada mi estilo, pero es que siento impotencia (de la grande) cuando tengo tantas ganas de aprender, de innovar, de mejorar... y me veo tan sola, es decir, con tan poco apoyo. Sólo pretendo realizar mi trabajo lo mejor posible, y es lo que hago, pero me reitero en que, dentro de mí, algo me dice que podríamos hacer mucho más. Y estoy segura de que muchos profesionales de la educación comparten mis inquietudes.

Muchos me felicitáis por iniciativas que llevo a cabo en el aula: el Proyecto Emocionario, las técnicas de relajación y el mindfulness, la caja de la gratitud, actividades como "Tú eres el mejor regalo del mundo" o "¿Cómo nos ven los demás?", los valores trabajados en el Proyecto Cuéntame un cuento... Y me paro a pensarlo y veo que, en realidad, trabajo muchos aspectos en el aula además de las asignaturas del currículum como lenguas o matemáticas (que también las trabajo, ¿eh? ;-). Sin embargo, todo surge de mis propias inquietudes y de investigar por aquí y allá. Leo libros, artículos, veo vídeos... Voy cogiendo de aquí y de allá, me voy entusiasmando y lo traslado al aula. Con mucha ilusión, eso sí, pero sobre todo con grandes dosis de autoformación y sentido común. Y está muy bien, no digo que no (mejor eso que nada), pero ¿por qué no hay más oferta formativa para docentes? ¿Por qué no puedo acceder a una formación completa y de calidad en este ámbito? ¿No podría hacerlo mucho mejor con una formación adecuada?

De hecho, buscando y buscando, he encontrado una formación que me ha puesto los dientes largos y que me encantaría realizar. Se trata de un título de "Especialista universitario en coaching y educación emocional para la excelencia educativa". Suena bien, ¿no? Pues su programa educativo suena todavía mejor:

1. Neurociencia y Resiliencia
  • El Cerebro y su funcionamiento.
  • Modelación de hábitos. Modulación del cerebro.
  • La Resiliencia. Qué es. Cómo ser una persona resiliente.
  • Consecuencia de trabajar el proceso de resiliencia con el alumnado y las familias.
  • Niveles neurológicos y desarrollo personal. Claves y procesos.
2. La mejor versión de ti como educador
  • Educador versus docente. Nuevos paradigmas en Educación.
  • Habilidades docentes- Coach y su desarrollo: empatía y escucha activa, automotivación, feedback.
  • Competencias para la excelencia educativa y métodos para su desarrollo: liderazgo, comunicación, trabajo en equipo, toma de decisiones, innovación.
  • Innovación y compromiso en el contexto educativo: misión-visión.
  • Inteligencia emocional: quién soy como Educador. Autoconocerse para conocer al alumnado.
  • El alumno: quien es y qué trae al proceso educativo.
3. Educación Emocional. Modelos para trabajar la IE en el aula.
  • Emociones y gestión emocional.
  • Recursos y técnicas para la gestión física, mental, y emocional saludables.
  • Mindfullnes: la consciencia llevada al ámbito educativo.
  • Educación no violenta.
4. Coaching. Fundamentos y metodología para el éxito.
  • ¿Qué es el Coaching? Historia y recorrido. Fundamentos profesor UCM.
  • ¿Para qué el Coaching? Comunicación. Parte racional y parte emocional.
  • Arquitectura de la pregunta poderosa. PRACTICAS.
  • Metas. Objetivos y Tareas.
  • Modelos de Coaching.
  • Creencias y valores.
  • Cómo se diseña un plan de acción.
  • El proceso de Coaching y los distintos modelos de intervención. PRACTICAS.
5. Herramientas que enriquecen el proceso educativo y de coaching.
  • Cómo atender al compromiso en la acción.
  • Coaching y análisis transaccional.
  • Coaching para adolescentes.
  • Modelo Sistémico aplicado al Coaching.
  • Herramientas que facilitan un ejercicio de la metodología más exitosa.
6. Coaching para la excelencia en contextos educativos. Coaching en acción.
  • Coaching como metodología en el aula. Intervención excelente.
  • Coaching en Orientación Educativa.
  • Coaching en la Orientación Familiar.
  • Coaching en la Orientación Laboral.
7. Programación Neurolingüística (PNL) para el aprendizaje.
  • Orígen y definición de la Programación Neurolingüística.
  • Los canales de Comunicación. VAK.
  • El lenguaje y su impacto en el cerebro.
  • Pensamiento-palabra-acción.
  • Comunicación verbal y Comunicación no verbal.
  • Comportamientos aprendidos.
  • Modelaje de los patrones de la conducta.
  • Anclaje y Cambio.
  • Lenguaje asertivo en el proceso educativo.
8. Desarrollo del talento y potencial humano desde la metodología Coaching y el uso de la PNL.
  • Talento y potencial en el contexto educativo. Técnicas para su detección.
  • Modelos de intervención innovadores en casos de dificultad de aprendizaje (altas capacidades, TDH TA).
  • Altas capacidades y programas de desarrollo actuales.
  • Imaginación y creatividad. Diferentes conceptos para el trabajo con talento desde el aula.
  • Coaching y otras técnicas complementarias aplicado al desarrollo del talento: arteterapia.
9. Evaluación de la calidad en contextos educativos.
  • Procedimientos e instrumentos de medida de la calidad.
  • Indicadores de calidad.
  • Evaluación de procesos.
  • Evaluación del proceso de Coaching.
10. Planes de acción para la intervención excelente. Desarrollo y puesta en marcha.
  • Desarrollo de competencias.
  • Desarrollo de metas, objetivos y tareas en contextos educativos.
  • DAFO como punto de partida.
  • CAME para el plan de acción.
  • Diferentes modelos para el desarrollo de metas por el docente.

¿Cómo os quedáis? Resiliencia, la mejor versión de ti como educador (¿puede sonar algo mejor?), emociones, mindfulness, coaching, programación neurolingüística (hace la tira de años que se habla de ella, pero ¿qué maestro la conoce?), desarrollo del talento y potencial humano, imaginación, creatividad, evaluación de la calidad, intervención excelente... ¿Cómo puede haber tantas cosas maravillosas en un mismo programa? Que conste que me ha costado encontrarlo, ¿eh? ;-)

Supongamos que tuviera los 3000 eurazos que cuesta realizarlo, supongamos que también tuviera el dinero necesario para desplazamientos en avión y alojamiento en Madrid todos los días que se realiza la formación (más o menos un fin de semana cada 15 días, desde octubre hasta abril), supongamos que estoy dispuesta a sacrificar mi tiempo personal y de dedicación a mi familia para realizar esta formación en Madrid, supongamos que también estoy dispuesta a compaginar mi vida profesional (el día a día en el colegio) con mi vida familiar, la crianza de mis hijos y el mantenimiento del blog con el estudio diario y los exámenes que supone este tipo de formación... ¡Uf! ¡Qué agobio! ¿No es mucho suponer? Y aún así me muero de ganas de hacerla...

En fin, que no sé cómo no se incluye todo esto en Magisterio (¿de verdad pensáis que nuestros maestros salen bien formados de la universidad?), y tampoco sé por qué no se incluye en programas de formación al profesorado en todas las Comunidades Autónomas (y que fueran accesibles a todos).

Me da mucha rabia que muchos docentes tengamos tantas ganas de aprender y nos lo pongan tan difícil. Porque además, si realizara esta formación, ¿qué ganaría? Pues satisfacción personal, desde luego. Mejorar mi calidad como docente, seguro que también. Y beneficios para mis alumnos, creo que es evidente. Pero ya que se potencia tan poco la formación del profesorado (no te la valoran ni económica ni moralmente, ni puedes ascender en tu puesto de trabajo), pues podría ser algo más accesible, ¿no? Porque, desde luego, ya son ganas de poner una prueba de fuego a la vocación de uno... ¿Me decís quién está dispuesto a invertir tanto esfuerzo económico, de tiempo y energía, y de renunciar a tantas cosas sólo por satisfacción personal? Quizás personas inquietas y soñadoras como yo...

En fin, que vuelvo a disculparme por quejarme tanto en este post, pero creo que sólo es fruto de mis inquietudes como profesional, de mi afán por mejorar y ofrecer a mis alumnos lo mejor de mí (me ha encantado eso de la mejor versión de ti como educador) y de mis ansias por ver cómo la educación en este país por fin da un giro, se despolitiza y avanza hacia otros modelos europeos que han demostrado con creces ser mucho más válidos y exitosos que el nuestro. Ojalá algún día lo vea...

Emocionario: EUFORIA

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Seguimos con el Proyecto Emocionario y en esta ocasión vamos a trabajar la siguiente emoción: la euforia



Cuando vimos la ilustración, mis alumnos lo tenían claro: tiene pinta de algo bueno. Que ya hemos hablado muchas veces en clase de que no existen emociones buenas ni malas (otra cosa es cómo las gestionemos o cómo reaccionemos ante una determinada emoción), pero lo entendí perfectamente: se referían a que era algo positivo.

Pablo S. pensó si se podía tratar de la alegría, y Pablo C. de la felicidad... Miramos nuestro mural de las emociones... ¡Ya las hemos visto antes! Eso sí, está muy relacionada.

Me pidieron pista. Entonces les dije: "Cuando esa alegría y esa felicidad son muy intensas... estamos súper, súper contentos... nos sentimos...". Y Teo dijo: "¡Auféricos!". ¡Jajaja! ¡Casi, casi! ¡Muy bien, Teo, nos sentimos eufóricos!

La euforia (que significa "fuerza para soportar") es un sentimiento intenso de bienestar, felicidad, excitación y júbilo. Cuenta el emocionario que la euforia es un desbordamiento de energía positiva y que nos brinda fuerza para enfrentar momentos de adversidad, o para festejar con un entusiasmo muy por encima de lo habitual. Si bien es cierto que la palabra permite hacer referencia a la capacidad para tolerar el dolor y superar adversidades, el uso más habitual se asocia al bienestar y la felicidad. Es tan extraordinario el bienestar que experimentas, que te muestras totalmente optimista y con capacidad para superar cualquier reto.

La euforia es lo opuesto al desaliento.

La euforia aparece como consecuencia de una buena noticiao de una experiencia muy positiva. Cuando busqué un ejemplo en mi interior para explicar a los niños claramente qué era la euforia, lo primero que me vino a la mente son las imágenes que cada 22 de diciembre dan por la tele, con todos esos afortunados a los que les ha tocado la el gordo de Navidad cantando, chillando, saltando y empapándose de cava, mientras planean mentalmente en qué se van a gastar todo ese dinero. Desde luego, están eufóricos. Y así se lo hice saber a mis niños. Y nos reímos, mucho. (Luego les tuve que explicar eso de que el dinero no da la felicidad, y que hay cosas en la vida MUCHO más importantes, pero no hay duda, si nos toca la lotería, nos sentimos eufóricos :-) Algo que quizás les toca más de cerca a mis niños futboleros es cuando su equipo preferido gana la liga, la Copa o la Champions League. Igual ellos no salen a bañarse a la fuente, pero creo que el país está lleno de eufóricos que sí lo hacen (y de otro buen número de decepcionados). Luego están los que, como yo, viven al margen de los eventos futboleros y cuando ya ha empezado el partido y empiezan a oír petardos o a ver comentarios por las redes sociales, preguntan: "¡Ah! ¿Que hoy hay fútbol?".

En fin, nos quedó claro que la euforia es como un ¡súper guau! y que a veces resulta incontrolable, por lo que podemos chillar de alegría o dar saltos como cabras monteses ;-)

Aunque también hay esa euforia que nos hace sentir un poco todopoderosos y con la que nos entran ganas de "comernos el mundo". ¿Motivación modo on, a todo gas? ;-)

¿Y qué pone eufóricos a mis alumnos? Esto es lo que me contaron:

  • Keyla se siente eufórica "cuando me dan dinero". Para un niño es como que te toque la lotería a  menor escala, ¿verdad?
  • Lola se sintió eufórica "cuando fui a Disney". No me extraña. Entrar en ese mundo mágico es lo más. ¡Lo que ha dado de sí ese viaje!
  • Claudia se sintió eufórica "cuando era mi cumpleaños y lo estaba preparando todo". Es que llevamos varias semanas hablando de los cumpleaños. ¡Mucha ilusión, entusiasmo y euforia!
  • Toni nos contó que "un día, cuando jugaba con mi primo, me sentí eufórico". Entonces le pregunté: "¿Y quieres contarnos a qué jugabais, que era tan maravilloso?". "A fútbol", me contestó. ¡Ah, claro! No sé para qué pregunto...
  • Marc nos contó: "Cuando en la escuela de verano marcamos tres goles y el equipo contrario no marcó ninguno, cuando acabó el partido me sentí eufórico". ¡Ay, esa sensación de victoria! ¡Y, encima, jugando al fútbol!
  • Marco relató una historia similar: "Ayer, cuando acabamos el partido, me puse eufórico". "¿Ganasteis?", le pregunté. "Sí, 9 a 0". ¡Guau! ¡Uno de esos partidos para recordar!
  • Teo se sintió eufórico "cuando me dijeron que voy a Bulgaria con un amigo mío". ¡Jo, qué bien! "¿Y cuándo vas?", le pregunté. "Cuando se termine el cole", me contestó. ¡Pues ya queda muy poquito!.
  • Nico nos contó que "cuando me dieron la noticia de que un sábado iba a hacer una fiesta de pijamas, estaba eufórico". ¡Si es que tenéis unos planazos! Cuando yo era pequeña, nunca fui a una fiesta de pijamas...
  • Carlos G. se siente eufórico "cuando estoy a punto de irme a Vela Portals". Y seguimos, una semana más, hablando de deportes acuáticos. ¡Lo de este chico es pasión por el mar!
  • Óscar nos dijo: "Un día, mis padres me dijeron que nos íbamos al festival y, sin darme cuenta, me llevaron al aeropuerto para ir a Barcelona, y me puse como se dice la palabra esa...". Eufórico, se dice eufórico. No me extraña, ¡menudo sorpresón!
  • Biel nos contó que "cuando en mi casa me dieron la noticia de que Teo iba a venir a jugar, me puse euférico". Claro que sí, Biel, ¡si es que era un notición!
  • Giulia nos dijo que "el otro día, cuando me dijeron que me iba con mi prima y mi primo a la piscina, me sentí eufórica". ¡Me encanta cómo disfrutáis de las cosas sencillas y familiares!
  • Bruno se sintió eufórico "cuando mi madre me descargó un juego que se llama Clash of clams". ¿Llevabas mucho tiempo deseando ese juego?
  • Keyla volvió a intervenir diciendo que también se siente eufórica "cuando me voy con una amiga a dormir". Claro, si es que son momentos súper especiales. Eso sí lo hice yo alguna vez de pequeña, y también recuerdo que era genial. Entre que es genial de por sí, y que lo hice en contadas ocasiones... ¡también me sentía eufórica!
  • Adrián se sintió eufórico "ayer, después del fútbol, cuando fui a un supermercado que habían abierto ese día, el ALDI". ¡Vaya! ¡No sabía que te producía tanta alegría ir a supermercados! La verdad es que nos reímos bastante. Adrián insistió en que le hizo mucha ilusión y le produjo euforia. No sé, igual era la novedad de inspeccionarlo todo y verlo tan nuevo y reluciente.  O no, quizás es que disfruta enormemente de ir al súper. ¡Mamá de Adrián! ¡En unos añitos ya sabes a quién enviar a hacer la compra! ¡Qué gusto!

¿Y a vosotros? ¿Qué os pone eufóricos? Pues yo no sabría decir, creo que bastantes cosas, jeje. Siempre he sido de emociones intensas ;-)

En breve, ¡una nueva emoción!

* Aunque yo no voy a utilizar las fichas de actividades porque mis alumnos son muy pequeños, aquellos que trabajéis el emocionario con niños de más edad, disponéis de unas fichas de trabajo preparadas para realizar después de cada emoción. Aquí podéis descargar la ficha de la euforia.

Aquí si quieres adquirir el libro Emocionario.


Segundo trailer de la película de Disney-Pixar: Inside Out

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Hace unos meses os hablé aquí de la próxima película de Disney-Pixar Inside Out (Intensa-mente en Latinoamérica y Del revés en España) en la que las emociones de Riley (una niña que se ve obligada a abandonar su ciudad natal por el cambio de trabajo de su padre) son las protagonistas. Os presenté a los personajes (Anger, Disgust, Joy, Fear y Sadness) y pudimos ver el primer trailer. Aunque Joy (alegría) es la emoción principal de Riley y siempre intenta mantener una actitud positiva, las emociones chocarán y reinará el caos en el Cuartel General (centro de control en la cabeza de Riley) a la hora de decidir cómo actuar en una nueva ciudad, un nuevo hogar y una nueva escuela.


Cada vez estamos más cerca de su estreno (el 17 de julio en España) y estos días estamos empezando a ver por los medios el segundo trailer de la película. Ya comenté en su día que el hecho de que Disney apueste por el mundo emocional quiere decir que éste cada vez está cobrando más fuerza y protagonismo en nuestra sociedad. ¡Bien!

Ya sólo queda esperar a ver la película, que espero que no me decepcione. Lo que ya habremos ganado, sin duda, es que millones de niños se acercarán al mundo emocional de una manera amena y divertida. 

¡Seguro que esta película dará mucho juego!

Videoclip: SONRISA

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La semana que viene finaliza el curso y tenía muchas ganas de hacer algo especial con los niños, así que hemos elaborado un videoclip con una canción "buenrollera" donde las haya: Sonrisa, de Ana Torroja.

Tengo que reconocer que esta canción me ha gustado mucho siempre. Me da energía y una inyección de positivismo cuando la oigo. Por eso pensé que podría gustarle a mis niños (y no me equivoqué, ¡les ha encantado!). Además, nos viene como anillo al dedo porque no sé si recordaréis nuestras normas de aula, pero una de ellas dice literalmente: "Regalamos siempre una sonrisa". No recuerdo haber pensado en la canción cuando elaboraba las normas, pero ¿quién sabe? ¡Igual influyó inconscientemente! Así que sonreír no es una opción, ¡lo dicen las normas de clase!

Como muchos de vosotros seguro que me preguntáis cómo he elaborado el vídeo, os contaré un poquito el proceso:

Lo primero que hice fue presentarles a los niños la canción. Vimos el videoclip original y trabajamos la letra.

Enciendo velas en la madrugada, 
voy deshojando flores en la almohada, 
mirando al techo me dejo llevar a otra realidad. 

Y observo el sol que entra por mi ventana 
que me despeja y renueva mis ganas, 
miro al espejo y me pregunto qué me espera afuera. 

Y siento todo tan brillante y tan magnético, 
nada ni nadie puede hacer que me derrumbe hoy, 
que tiemble el suelo que allá voy, 
pisando fuerte y sin reloj. 

Tengo una sonrisa para regalarte, 
tengo mil cartas de amor 
y tengo todo el tiempo que perdí sin ver el sol. 
Tengo mil historias que quiero contarte 
escondidas en mi voz, 
no quiero dejar nada por sentir, ya sé quién soy. 

Y salgo a pasear entre la gente 
y juego a imaginar de dónde vienen, 
y me enamoro de cada rincón 
dejando al corazón volar. 

Y extiendo la ciudad mirando al frente, 
esta mañana el mundo es diferente, 
descubro tantas cosas que no vi por no quererme. 

Y siento todo tan brillante y tan magnético 
nada ni nadie puede hacer que me derrumbe hoy 
que tiemble el suelo que allá voy, 
pisando fuerte y sin reloj. 

Tengo una sonrisa para regalarte, 
tengo mil cartas de amor 
y tengo todo el tiempo que perdí sin ver el sol. 
Tengo mil historias que quiero contarte 
escondidas en mi voz, 
no quiero dejar nada por sentir, ya sé quién soy. 

Ya pienso que amanece 
y me respiro la mañana, 
desaté las vendas que ocultaban mi mirada, 
no quiero que la prisa 
me obligue a no ver nada, 
por fin la lluvia me toca. 

Tengo una sonrisa para regalarte, 
tengo mil cartas de amor 
y tengo todo el tiempo que perdí 
sin ver el sol. 
Tengo mil historias que quiero contarte 
escondidas en mi voz, 
no quiero dejar nada por sentir ya sé quién soy.

Aunque no lo creáis, hicimos nuestra reflexión en clase sobre la letra. Serán niños de 1º de primaria, pero la verdad es que se puede hablar con ellos de todo. Hay frases en la canción que no tienen desperdicio: 

  • "Nada ni nadie puede hacer que me derrumbe hoy". Ahora es cuando yo suelto una frase tipo manual de autoayuda: "El poder está dentro de ti". Pero es que realmente es así, ¿verdad? Y eso es lo que siempre intento hacer ver a mis niños. Ante las mismas circunstancias, nuestra actitud será la que marcará la diferencia. Como ya dije una vez, el "menú" (lo que nos depara la vida) nos lo tendremos que comer igual, ¿no?
  • "Que tiemble el suelo que allá voy, pisando fuerte y sin reloj". Lo de que tiemble el suelo suena a sobredosis de seguridad (aunque más vale que sobre que no que falte). Lo de pisar fuerte me encanta ;-)
  • "Tengo una sonrisa para regalarte". Es el lema ¿no? Lo dice la maestra y lo dicen las normas de aula. ¡Hay que sonreír siempre! Además de alegrar al que tenemos al lado, la sonrisa es un factor más que ayudará a mejorar nuestra actitud interior.
  • "Y tengo todo el tiempo que perdí sin ver el sol". Ana Torroja ya tiene unos añitos, y posiblemente se haya dado cuenta de que no vale la pena desperdiciar ni un minuto de la vida (por estar triste, por estar enfadado, por sentirme inseguro... da igual). Mis tiernos niños no creo que hayan tenido nunca esa sensación, ¡por eso espero que no la sientan nunca! ¡Ni un solo día sin ver el sol!
  • "Ya pienso que amanece y me respiro la mañana". Esa es la actitud, ¿no? Mindfulness, conciencia plena, ¡energía positiva para afrontar el día!
  • "Desaté las vendas que ocultaban mi mirada". Dicen que no hay peor ciego que el que no quiere ver. ¿Hace falta decir más? Pues eso, ¡mucho autoconocimiento para entender mi mundo interior y el mundo que me rodea!
  • "No quiero que la prisa me obligue a no ver nada". ¡Toma ya! Vísteme despacio que tengo prisa. En un mundo como el de hoy, donde todos vamos corriendo... ¿Disfrutamos de lo que hacemos? Ahí lo dejo...
  • "Por fin la lluvia me toca". Interpretaciones varias: ¿Por fin la lluvia me toca porque siempre voy con tanta prisa que ni la percibo ni la disfruto? (más mindfulness). ¿Por fin la lluvia me toca y no me incordia o me moja? (cambio de actitud ante la misma situación). Mmmmmm....

En fin, podríamos analizar toda la canción :-)

Una vez que mis niños ya se habían entusiasmado con la canción (bastó un par de veces de oírla y el entusiasmo de su maestra explicándoles la letra), empezamos a practicarla en clase. Un día aprendimos el estribillo, otro día una estrofa, otro día otra... La íbamos cantando asiduamente en clase y mis niños cada día la sabían mejor y la disfrutaban más.

El siguiente paso fue asignar a cada niño una frase de la canción. Me puse a hacer cálculos y vi que podíamos grabar los estribillos de forma colectiva y las estrofas repartiendo una frase a cada uno, para que se sintieran todos protagonistas. Y así lo hice. Asigné a cada niño una frase y la apuntaron en su agenda. Tenían que aprenderla muy bien y decidir cómo querían interpretar su "momento de gloria".

Y después decidimos qué queríamos hacer en los estribillos y en los trozos instrumentales donde no hay voz. Contamos los tiempos que había, y calculamos los pasos. No practicamos mucho, la verdad, sólo teníamos una idea de lo que queríamos hacer. Y los niños hicieron un dibujo de una sonrisa. Teníamos claro que queríamos que salieran en nuestro primer estribillo.

Y una vez que sabíamos la canción y dominábamos nuestro trocito individual, ¡sólo quedaba empezar a rodar!

Un día grabamos todos los trozos individuales. Cogí una pantalla verde (chroma) y los niños interpretaron su frase con los gestos que habían preparado. ¡Totales! Aquí tenéis a Giulia en pleno proceso de grabación de su escena. Y, con la magia del chroma, ¡tachán! ¿Ya habéis adivinado qué frase le tocó a Giulia? Y siento todo tan brillante y tan magnético...


Y ayer grabamos los trozos colectivos, con las ideas que habíamos hablado en clase y también improvisando bastante, la verdad. El primer estribillo lo grabamos en el aula y los otros dos en el patio. Y los trozos instrumentales en la sala de psicomotricidad y en el polideportivo. Fue un día agotador, todavía no me he recuperado, jajaja, y es que los niños estaban que no paraban quietos y yo intentaba coordinarlo todo a veces alzando la voz más de la cuenta (es lo que tienen los espacios abiertos y niños corriendo de aquí para allá. ¡Admiro a los profes de educación física! El aula es un espacio mucho más fácil de controlar) y sudando a mares (entre el bailoteo al sol y el estrés, con este calor sofocante de junio....). Pero objetivo conseguido, ¡ya descansaré en vacaciones!

[Edito] Por cierto, mis niños también acabaron agotados. Después de grabar todo, al llegar a clase, hicimos nuestra sesión diaria de mindfulness, pero aprovechando que las mesas estaban retiradas, nos tumbamos en el suelo. ¡No se movían ni un milímetro! Si el suelo hubiera estado acolchado, ¡más de uno se hubiese quedado frito!, jeje.


Después sólo quedaba el proceso de montaje en casa. Y como me lo pedís muchas veces, yo uso el programa iMovie para Mac. El básico, el que viene de serie con el ordenador. No soy para nada profesional y hago lo que puedo, aunque creo que se nota que me encantan las nuevas tecnologías, ¿verdad?

Aunque ayer lo tenía listo, no he querido publicarlo hasta hoy porque quería verlo en primicia con mis niños. Creo que sobra decir que han disfrutado muchísimo, tanto hoy, al ver el resultado, como con todo el proceso. Han aprendido la canción con mucha ilusión y han rodado como auténticos artistas. Las risas, hoy, se oían en todo el colegio. Y es que todavía se sorprendían con el efecto del chroma. "Pablo, ¿esa es tu casa?", preguntaban. "¡Que no! ¡Que lo grabamos en el gimnasio!". ¡Jajajajaja!

En fin, espero que disfrutéis con este videoclip, que no será para nada profesional, pero sí está hecho con mucho mimo, tanto por mi parte como por la de los niños.

¡Os regalamos a todos nuestras sonrisas y os mandamos una buena dosis de energía positiva ahora que estamos a punto de disfrutar de las vacaciones! El balance del curso, sin duda, ¡es más que positivo!

Los animales vertebrados

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Uno de los temas que hemos visto este curso (y que volveremos a ver el próximo) en clase de ciencias naturales ha sido todo lo relacionado con los animales vertebrados

Tengo que decir que ha sido uno de los temas que más han disfrutado los peques, y es que les encanta todo lo relacionado con los animales.

Y aunque estamos acabando el curso y lo que menos apetece es introducir nuevos contenidos, quiero compartir con vosotros unos vídeos sobre el tema que me han encantado (¡ojalá hubieran estado cuando estudiamos el tema!). Son cortitos, muy amenos y visuales, y con todos los datos que necesitamos saber sobre este gran grupo de animales. Así que, antes de acabar las clases, nos pueden servir como repaso de lo que ya vimos hace unos meses. ¡Y seguro que el próximo curso los volvemos a ver!

El primero de ellos nos explica qué son los animales vertebrados y su diferencia con los animales invertebrados.


Como vimos en clase, los animales vertebrados se clasifican en 5 grupos: mamíferos, aves, reptiles, anfibios y peces. Estudiamos las características de cada uno de estos grupos: de dónde nacen, de qué tienen cubierto el cuerpo, dónde viven... ¡Nos hubieran resultado muy útiles estos vídeos que nos lo explican a la perfección!

Primer grupo: los mamíferos.



Segundo grupo: las aves.



Tercer grupo: los reptiles.



Cuarto grupo: los anfibios.



Quinto grupo: los peces.

Por ahora veo que no han creado ningún vídeo sobre los peces. Estaré pendiente del canal, y si lo crean, lo añadiré aquí.

Lo principal que tenemos que saber de los peces es que son ovíparos (nacen de huevos) y no cuidan de sus crías, tienen el cuerpo cubierto de escamas, son acuáticos puesto que viven en el agua (dulce o salada) y, por ello, tienen aletas para nadar y respiran por branquias.

Y para quien estudie las ciencias naturales en inglés (science) aquí tenéis los mismo vídeos en inglés.

Vertebrate animals.



Mammals.



Birds.



Reptiles.




Amphibians.


Fishes.

¡Espero que os resulten amenos estos vídeos que y os sirvan para aprender muchas cosas sobre los animales!

En verano... ¡helados!

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Queda nada para que empiece el verano, y en verano ya sabemos lo que toca: ¡es época de helados

En el post cortito de hoy quería enseñaros una manualidad muy bonita y refrescante para esta época del año. Como ya sabéis, mis alumnos la han realizado en clase de Arts&Crafts con su profesora Violeta.



¿Qué os parecen? ¿A que son bonitos? Seguro que a mis papás no les viene de nuevo, puesto que hoy se han llevado a casa una carpeta con todos sus trabajos realizados en clase de Arts&Crafts. Supongo que más de uno se ha quedado con la boca abierta, porque tengo que decir que han hecho unos maravillosos trabajos durante el curso. ¡Si es que ya he dicho en muchas ocasiones que son unos artistas!

También hoy los niños han podido disfrutar de un patio un poco más largo y muy especial, ¡puesto que el APA les ha regalado a todos un polo de fresa! Mirad qué contentos están con su polo y lo bien que les viene en esta época tan calurosa.


Aprovecho para agradecer al APA esta iniciativa, ya que a los niños les hace mucha ilusión. Ya sabemos que "sólo se trata de un polo" y que, seguramente, tomarán muchos durante el verano, pero no todos los días lo comparten todos juntos en el colegio. ¡Ellos viven de una manera especial estos pequeños detalles! Han recibido su regalo coreando: ¡polo, polo, polo! y dando saltos de alegría. ¡Ah! ¡Y cantando la canción "sonrisa"! ;-)

Una pequeña anécdota de la jornada que me ha hecho mucha gracia es que cuando estaban tomando el polo, ha venido Biel y me ha dicho: "Elena, estoy tomando el polo como tú dices: ¡saboreándolo mucho!". Y es que, precisamente hoy, habíamos tratado el placer en clase, en el Proyecto Emocionario, y hemos dialogado largo y tendido sobre la conciencia plena, el mindfulness, la frase de la canción "sonrisa" que dice "No quiero que la prisa me obligue a no ver nada", el disfrutar de las pequeñas cosas que hacemos, prestando atención a los detalles, y la diferencia, por ejemplo, entre comer algo disfrutándolo y saboreando cada bocado o simplemente "engullir". ¡Veo que Biel ha atendido! ;-)

También aprovecho para decir que, aunque acaben las clases, todavía tengo algunos posts pendientes de publicar y que os lo iré contando todo progresivamente en las próximas semanas. La verdad es que esta semana estoy muy liada con la evaluación final, tengo mucho trabajo y, además, ¡estoy bastante cansada! Pero quedan pendientes las últimas sesiones del Proyecto Emocionario y ¡por supuesto que os lo contaré todo!

Da gusto ver a los niños tan contentos estos días, aunque la verdad es que también los noto bastante cansados y movidos. Creo que ya necesitan su bien merecido descanso, puesto que han trabajado mucho y muy bien durante todo el curso. La progresión de TODOS ellos ha sido espectacular a lo largo del curso. ¡Madre mía, si no tienen nada que ver con los niños que recibí en septiembre! Tengo que decir que estoy muy orgullosa de ellos :-) Y saber que el curso que viene, en segundo, seguiremos avanzando y creciendo juntos ¡es lo más!

En fin, ahora toca disfrutar de estos últimos dos días de curso, y tranquilos, ¡poco a poco iré publicando todo lo que tengo pendiente!

Emocionario: DESALIENTO

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Bueno, aquí estoy, casi dos semanas más tarde de lo previsto... y es que no han dejado de surgirme imprevistos. Sin embargo, todavía tengo varias cosas que contaros del fin de curso, especialmente las sesiones con las últimas emociones del Proyecto Emocionario. A ver si cojo carrerilla y os lo puedo contar todo seguidito en los próximos días.

Aquí tenéis la ilustración de la sesión de hoy.



Tras observar la ilustración, mis alumnos me pidieron pistas para poder adivinar la emoción. Les dije que era contrario a la euforia (era la última emoción que vimos. Hace ya unas semanas que la publiqué, pero ellos la habían trabajado recientemente). También les dije que era como sentir una falta de energía, de motivación... Seguían con dudas. Les leí la primera frase del emocionario:

Sentimos ¿? cuando nos falta el aliento para seguir adelante; cuando empezamos a notar cansancio y lo que tenemos entre manos ya no parece tan fácil.

Lola inclinó un poco la cabeza y me preguntó tímidamente: "¿Desaliento?". Muy bien, Lola, es el desaliento. Seguro que parecía evidente, pero no tenemos que olvidar que mis alumnos cursan primero de primaria (bueno, ¡ahora ya están recargando pilas para empezar segundo en septiembre!).

Si buscamos en el diccionario, la definición del desaliento es clara: "Decaimiento del ánimo, falta de fuerzas o ganas de hacer algo". El emocionario, además, nos pone un ejemplo: "Imagina que estás en un bosque y quieres regresar a casa. Emprendes un camino y no es el adecuado. Regresas al punto de partida. Buscas otra ruta. Tampoco es esa. Insistes. Vuelves a equivocarte. Al cuarto intento, percibes que tus fuerzas fallan, te desanimas. Eso es el desaliento".

A medida que el desaliento se acerca, nuestra meta se aleja. Cuando nos vence el desaliento y nos rendimos, se abre paso la decepción.

Creo que mis alumnos entendieron bastante bien esta emoción, porque enseguida tuvieron ganas de poner ejemplos basándose en su propia experiencia. La verdad es que todos sentimos desaliento en diferentes situaciones. Lo importante, creo yo, es buscar otras vías para evitar que el desaliento se instaure, pudiendo llegar a fases más permanentes de apatía o falta de ánimo.

¿Y en qué situaciones han sentido desaliento mis alumnos?
  • Marc: "Cuando mi padre viene a recogerme y yo no he recogido la bosseta de mi hermana, que me lo dice mi madre y yo me olvido cada día, hacemos una carrera mi padre y yo, con Noa en sus hombros. Y yo siempre gano, pero él lo intenta con todas sus fuerzas y se desalienta". ¡Jajaja! ¿Y no te dejarás la bosseta de Noa conscientemente porque estás deseando esa carrera? Venga, la próxima vez dale un poco de ventaja a tu padre, que no debe ser nada fácil correr con tu hermana sobre sus hombros. Y así le ayudas a dejar de sentir desaliento... ;-)
  • Pablo S. sintió desaliento "cuando era sábado, cuando estaba jugando con mi tablet. Estaba jugando a un juego que se llama Slugterra, y cuando estaba en un nivel que ya he pasado muchos, me enfrenté contra el jefe que tenía un cañón y no paraba de disparar. Lo intenté con todas las slugs, pero al final no pude ganar". Bueno, pues otro día lo vuelves a intentar cambiando de estrategia. Quien la sigue, la consigue. Y mientras, te diviertes. Lo importante es no frustrarse, sólo se trata de un juego :-)
  • Claudia sintió desaliento "cuando el domingo estaba jugando con mi papá en la terraza, y había que encestar 20 bolas en la canasta. Mi padre había hecho ya 10 y me iba ganando. Lo intentaba y lo intentaba y no pude. Luego le adelanté. Pero al final me ganó". Bueno, Claudia, ¿y lo bien que lo pasaste jugando con papá? Es normal que sintieses desaliento cuando veías que por mucho que lo intentabas, no conseguías ganar a papá, pero lo importante es que eso no te hiciera sentir mal. Conociéndote, ¡seguro que no! ¡Seguro que para ti lo más importante no es ganar a toda costa sino disfrutar de momentos tan especiales en familia!
  • Keyla siente desaliento "cuando hacemos matemáticas y no entiendo algo, y lo intento y lo intento, pero no me sale". Vaya, Keyla, tenemos que hacer algo para quitarte de la cabeza que las matemáticas no se te dan bien. Ya verás, el curso que viene nos ponemos a tope y te demuestro que tú puedes con las mates y con todo lo que te propongas :-)
  • Óscar sintió desaliento "cuando un día estuve jugando a fútbol sala con mis compañeros. Terminó el partido y pensé: Ya no puedo más". Bueno, en ese caso sentiste falta de aliento literalmente. ¡Estabas exhausto! No me extraña, a mí también me pasa a los 10 minutos de subirme a la elíptica. Sin embargo, cuando continúas, descubres que tu cuerpo siempre es capaz de más de lo que pensabas.
  • Lola: "En un juego del iPad, estaba en un nivel y no lo conseguía. Y al final me quedé con desaliento". Lo mejor en esos casos es dejarlo para otro día. A veces nos obcecamos tanto con algo, que nos atascamos todavía más. Y en caso de intentarlo en diferentes ocasiones y no conseguirlo, siempre puedes pedir ayuda. En cualquier caso, te digo como a Pablo: nunca hay que olvidar que sólo es un juego. Aunque seguro que al minuto de haber cerrado el iPad, ya lo has olvidado :-)
  • Teo contó algo similar a Lola: "En un juego del iPad, de fútbol, iba a ganar la copa, pero en el último partido perdí y me quedé con desaliento". Bueno, en este caso yo creo que ya estamos tocando el terreno de la decepción. Tú dices que ibas a ganar la copa... y al final no se cumplieron tus expectativas. No pasa nada por decepcionarse, es lógico, pero no hay que desanimarse ni frustrarse. ¡Y no sólo por tratarse de un juego! Lo veremos en otras sesiones :-)
  • Pablo C. nos dijo que nunca había sentido desaliento. Lo mismo dijeron Luis, MarcoToni, Giulia, Eric, Suyay y Carlos S. En estos casos siempre digo lo mismo: ¿No lo habéis sentido nunca o ahora no podéis identificarlo o recordarlo en ninguna situación?. Pero ellos siempre insisten en que nunca lo han sentido. Bueno, en cualquier caso está fenomenal no sentir nunca desaliento (en alguno de ellos me cuadra y todo), pero lo lógico es llegar a sentirlo en algún momento. Lo que pasa es que se puede reaccionar de muchas maneras ante la misma situación. Me da que más de uno tiene fuerzas más que de sobra para no desanimarse ante las adversidades. ¡Súper!
  • Biel: "Un día, cuando me iba al campo de fútbol y mi padre me pidió que diera vueltas a todo el campo, hice una, y después otra, y después, en la tercera, me quedé desalentado". Te digo lo mismo que a Óscar, en este caso te falta el aliento físicamente. No hay que forzar el cuerpo. Tu entrenador sabrá cómo hacerlo para ir mejorando tu forma física progresivamente. ¡Aunque me consta que físicamente eres un crack!
  • Nico: "Cuando un día íbamos a hacer un paseo con las bicis, a un campo de fútbol, hice 5 km y estaba con desaliento". Vaya, otro desalentado físicamente. Mejor que nos desalentemos físicamente que emocionalmente... :-)
  • Carlos G. sintió desaliento "cuando en un juego de la Nintendo, en un nivel del sexto mundo, no lo conseguía pasar porque había lava por debajo, había una pared y el salto no llegaba". Ya te imagino saltando con todas tus fuerzas una y otra vez y cayendo constantemente en la lava. Te digo lo mismo que a todos tus compañeros que han expuesto situaciones similares. Sólo es un juego. Es lógico sentir desaliento cuando lo intentas repetidamente y no lo consigues, pero ya irás perfeccionando la técnica y conseguirás pasarlo. Y si no, no pasa nada. Sólo es un juego y hay muchos. ¡Y los juegos están para pasarlo bien!
  • Bruno: "Cuando estaba con mi padre recorriendo en bici el torrent de Santa Ponsa, había una cuesta que estaba llena de grava, y no la podía subir, me sentía desalentado". Claro, seguro que las ruedas te patinaban, ¿verdad? ¿Pero a que conseguisteis vencer la dificultad? A veces no se trata de empeñarse en hacer algo que es imposible o muy difícil. En ocasiones, simplemente, tenemos que buscar otra alternativa :-)
  • Adrián: "Lo mismo que Óscar". Y con lo mismo no se refería sólo a la misma situación, sino al mismo partido y el mismo equipo. Vaya por Dios, en ese partido los contrincantes os dejaron agotados. ¿Os hicieron correr mucho? ;-)
Pablo S, Lola, Marc y Claudia volvieron a intervenir, con anécdotas parecidas a las anteriores:
  • Pablo S. sintió desaliento "un día, cuando otra vez estaba jugando con la tablet, en el nivel 12, no pude conseguirlo".
  • Lola: "Un día, en una excursión que teníamos que subir el torrente de no sé dónde, me quedé con desaliento".
  • Marc siente desaliento "cuando estoy jugando al comecocos con Alonso, mi hermano Joan, Yago y Carlos S. Cuando Carlos S. la lleva, él me sigue, pero como corre tan rápido y yo también corro rápido, no me deja de perseguir, me canso y al final me pilla".
  • Claudia siente desaliento "cuando estoy jugando a la wii con mi papá y elegimos el deporte de la wii, que es el tenis, y cuando ya hemos empezado la partida, yo saco, él le da, pero cuando saca él, lo hace tan fuerte que yo me canso de perder". ¡Es que un buen saque en tenis puede ser imparable!

Como veis, el desaliento de mis alumnos se da principalmente en situaciones de juego y en momentos en que se quedan sin aliento físicamente. Así que por ahora van fenomenal. Me preocuparía más que sintieran desaliento en aspectos más trascendentales de sus vidas ;-)

En breve, ¡una nueva emoción!

*Aunque yo no voy a utilizar las fichas de actividades porque mis alumnos son muy pequeños, aquellos que trabajéis el emocionario con niños de más edad, disponéis de unas fichas de trabajo preparadas para realizar después de cada emoción. Aquí podéis descargar la ficha del desaliento.

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